sobre nosotros…
La historia de 25 de Mayo
SIGLO XIX EN 25 DE MAYO: Entrar en la historia de los corsos en “25 de
Mayo, Ciudad del Carnaval” también lleva a remontarse en el tiempo. Los
carnavales de antaño, 1889- 1890, fueron realmente destacables, tenían lugar en
horas de la tarde, debido a la falta de luz artificial. Infaltable el juego con
pomos de agua florida.
Los carromatos se adornaban, y todos los
mascarones que desfilaban se realizaban a mano. El recorrido del corso estaba
dado por las cuatro cuadras que rodeaban la plaza, a lo largo de las que se
colocaban muñecos llamados “Judas”, uno en el antiguo edificio municipal, los
demás a lo largo del recorrido. “La Noche del Entierro”, última noche de corso,
se efectuaba el espectacular incendio de todos los muñecos juntos. El fuego
tomaba mayor brillo por la falta de iluminación y la gran cantidad de cohetes y
bombas que explotaban en el cielo.Otro espectáculo con los Judas lo ofrecían
aquellos que llegaban desde el campo a caballo y durante la quema arremetían
contra los muñecos hasta descolgarlos, arriesgándose a un incendio.
De los testimonios escritos encontrados, él más
antiguo data del año 1896, una columna publicada en el periódico de entonces
“El Imparcial”, relata detalles de los bailes sin omitir chimentos de la
actividad social del momento durante los días de Carnaval en esta
ciudad.Pareciera estar mirando una película en blanco y negro del cine mudo,
año 1896, siglo XIX, inimaginable ahora en el siglo XXI, infinidad de cosas
distintas, pero también “esas” que no cambian con el tiempo, que hacen a la
vida, como por ejemplo la alegría, el amor…- SIGLO XX…Llega el siglo XX, y con
él todo tipo de carnavales para contar. Durante las primeras décadas, caminaban
todo el recorrido del corso, bandas numerosas en las que cada uno tocaba su
respectivo instrumento.En los años 20, las Fiestas se hacían de domingo a
martes, incluidos los principales Bailes, teniendo la bendición de la
Parroquia. El primer martes tenía lugar el “Corso de Flores”, en el que
circulaban los nardos, las mascotas, cantidades inmensas de “agua florida”. Los
personajes más destacados iban a parar a las páginas de “25 de Mayo”, revista
del Padre Salerno, en la que se observaba como diseño de tapa una foto de la
Iglesia ahuecada en el centro, lugar ocupado con imágenes de las mujeres o
niñas del pueblo. El sábado y domingo último, los pescadores se adueñaban del
desfile. En todo el recorrido se marcaba la alegría de personas de todas las
edades jugando con las históricas serpentinas “El Loro” que caían en grandes
cantidades como si fueran llamativas cascadas.La noche llegaba a su fin con el
último toque de las 12 en el campanario de la iglesia y el estallido de la
bomba. Entonces salían a relucir impermeables en los carruajes y palcos
sabiendo que iniciaba una lluvia de globos de agua escondidos en los techos y
terrazas, incluida la Casa Parroquial, -ya que el Padre Salerno fue uno de los
más entusiastas participantes-, sobre toda persona que pasara.
Los primeros años de esta década se utilizaban
vehículos con tracción a sangre de todo tipo, desde un sulky, hasta el
aristocrático “landau” alquilados a las cocherías veinticinqueñas.
LA DECADA DEL ´30 TRAE
NOVEDADES…
Ya entrando en los años 30, los corsos
consistían en duelos permanentes de serpentinas. Los caballeros acostumbraban a
obsequiar nardos, muñequitas, y si el interés iba más allá, se llegaba a los
bombones. Todo era galantería acompañada con un fino humorismo. En el trayecto
se levantaban palcos adornados por las mismas “niñas” que los ocupaban. El
recorrido era de calles 9 y 10 desde 27 a 31 variando según la extensión del
desfile. Circulaban con vía libre sulkys, charrets, volantas breaks, carros,
siempre y cuando estuvieran bien adornados con infinidad de flores y ramas.
Algunos se animaban a llevar animales sueltos, representando desde escenas
campesinas, hasta paisajes suizos.
Las mascaras sueltas, gauchos a caballo, parejas
de novios, cocoliches, payasos se volvieron infaltables, ruidosos e
incansables. Existían ya los premios a las distintas categorías: carruajes y
sulkys; murgas y comparsas y máscaras sueltas. Se contaba con muchos y famosos
Bailes de Carnaval, que tenían un lugar preferencial en el gusto popular,
amenizados por orquestas de bandoneón, violín, guitarra y contrabajo, las que
dejaban oír tangos, vals, pasos dobles y fox- trox, una buena novedad entonces.
Los días miércoles se desarrollaba una reunión a la que asistían con globos de
papel de seda rellenos de cenizas, las que solamente se arrojaban ese día,
salpicando sobre los hermosos vestidos con las cenizas de Cuaresma. Los
principales bailes tenían lugar en distintas casas particulares y en el Club
Social, en éste, las reuniones adquirían alto vuelo ya que la concurrencia era
seleccionada. Se podía observar tanto a elegantes señores del Comité de
Recepción, así como a las damas luciendo destacados trajes fantasías. Desde
aquellas épocas la comunidad se inclinó fervientemente por las Fiestas
Carnastolendas. A través de los años, los corsos veinticinqueños brillaron en
relieve y estilo, tanto los Corsos de Flores, los Infantiles, los de Agua, toda
una conjunción que atrajo siempre a contingentes de los más diversos puntos del
país.
AÑOS 40 Y 50, EPOCAS DE
GRAN ESPLENDOR…
Al igual que en años anteriores, los corsos
comenzaban el Domingo anterior al Lunes y Martes que marcaba el calendario como
feriados por dichas fiestas. La calle 9, aún empedrada, de 27 a 31 era el
escenario del desfile. A lo largo del trayecto colgaban lamparitas de colores,
logrando mejorar la iluminación y a su vez adornaban la acera. En ambas veredas
se ubicaban mesas y sillas plegables de chapa. En el centro de la calzada se
instalaban los kioscos que vendían: serpentinas, cornetas, globos, matracas,
chascos, caretas de cartón, antifaces, pomos de agua florida.Dentro de los
motivos que alegraban el corso había muchos y variados rodados: autos sin
capota, camiones, carruajes con tracción a sangre muy bien adornados con las
tradicionales flores y algo distinto y novedoso, grandes hojas de palmeras.
Todos ellos realizaban el trayecto ocupados por damas y caballeros de la
sociedad que podían ir disfrazados o no, pero si, contagiando alegría y
haciendo volar kilómetros de serpentinas, dejando a la “9” como pintada de
todos colores. Las comparsas eran tradicionales competidoras, pertenecían a
Luna y Castro, quienes duraron muchos años como “rivales”. Sus integrantes
vestían uniformes con zapatillas, pantalón, camisa y sombreros altos, a los
agregaban fajas y accesorios de todos los colores.Los Bailes Oficiales tenían
lugar en el Teatro Español a sala repleta. Previamente se mejoraba el lugar
nivelando el piso, adornando el ambiente y colocando en donde hoy están las butacas,
mesas y sillas de tal forma que el centro era la pista de Baile.- DECADA DEL
´60 (1960)… Hasta 1940, era improvisación, casualidad y ganas de divertirse.
Luego del desastre producido a fines de los 50, forzosamente, se convierte en
una empresa que debe encararse solidariamente. En los ’60, debido quizás al
ligero ritmo con que avanzan las manifestaciones sociales, la real Fiesta del
Carnaval se ve desdibujada. Los corsos pasan a ser reuniones de tipo vulgar.
Las comparsas, murgas y máscaras disminuyen su calidad, logrando desdibujar y
casi llevar al olvido tan milenaria tradición.A partir de 1960 y durante los 10
años posteriores, se viven hechos muy relevantes para la continuación de los
mismos, cambios, ideas nuevas entrelazadas con las de antaño. Todo en conjunto,
lleva a que la tranquilidad, pasividad, poco entusiasmo de los primeros años,
se transformen y así hacer resurgir el espíritu de alegría y predisposición que
poseen los veinticinqueños para estas fiestas, que llevaron a que la provincia conociera
a 25 de Mayo. Un conocido vecino, pionero entre del grupo amante de las
carnestolendas, pasa más de una mañana en el edificio comunal esperando ser
atendido por el intendente, Jacinto Zabala, uno de los hombres que con su
perseverancia, logra que el Carnaval 1963 sea un hecho.
– COMISIÓN DE CARNAVAL –
1963…
Sorteando más de un inconveniente, las
autoridades municipales citan a reconocidos vecinos, para conformar una
Comisión encargada de planificar, organizar y supervisar los corsos.
La Comisión estipula el recorrido por calle 9 de
27 a 31, indicó, además, que aparte de los 5 días calendario, tendrían lugar un
corso de agua y dos infantiles. A su vez se encargó de recaudar y dar a conocer
la cifra para los premios a repartir entre las distintas categorías. Otra de
sus tareas fue recordar y vigilar el cumplimiento del Reglamento de Faltas
vigente, el que entre otros puntos prohibía: el uso de disfraces del sexo
opuesto, vestiduras sacerdotales, uniformes militares de la época, el juego con
agua durante los corsos y en sitios de acceso libre, uso de disfraces sin
permiso oficial, etc.Todos los pronósticos pronosticaban un fracaso, pero se
puede decir que fue un éxito, ya que el público respondió con una muy buena
asistencia. La última noche de carnaval resultó ser la de mayor animación,
según estadísticas se presentaron en total más de 200 automotores y carricoches
y los permisos de disfraz otorgados llegaron a 167. La calle 9 vista desde lo
alto era una larga vía blanca cobijando a montones de veinticinqueños que no
olvidan las raíces.
– MOTIVACIONES
INDISPENSABLES…
Durante el año 63, el tema corso queda como
dormido, hasta olvidado, ya sea para autoridades como para la población en
general. A finales de Enero de 1964, se percibe la primera señal como adelanto
para éstas fiestas, la instalación eléctrica sobre calle 9 estaba lista.En cada
club, familias tradicionales de los mismos, pasan horas sin descanso para
terminar con todos los detalles en lo que respecta al decorado de salones,
carrozas y comparsas. Directivos de la comisión dan a conocer, días antes del
inicio, el recorrido dispuesto que será por calle 9, desde 27 a 32. Anuncian
novedad, la presencia del muñeco representando al Rey Momo, que será quemado el
último día de corso en las esquinas de 10 y 29, junto a un espectáculo de
fuegos artificiales. Con el correr de los días aumento el espíritu carnavalesco
en los veinticinqueños, hubo mayor cantidad de partidarios al juego con agua,
lo que hizo que la segunda noche se viviera el espíritu del carnaval. A partir
de 1964, la Comisión del Carnaval, comienza a trabajar y procura hacer renacer
“el carnaval” de décadas pasadas, tratando de unificar dos épocas muy distintas
para lograr un objetivo común. En enero de 1965, el presidente de la comisión
hace públicos algunos de los nuevos puntos tratados, uno de ellos es el
recorrido del desfile, el que contando con la buena predisposición de los
comercios se realizará por una sola mano: por calle 9 desde 28 a 30, por la 30
hasta la 10, transitando por la 10 hasta calle 28 y por esta a 9. Otro dato fue
la decisión de que los clubes colaboraran con un porcentaje de la venta de
entradas en los bailes y así poder aumentar el monto total de los premios a
entregar. Una muy buena noticia fue la iniciativa de proceder a la elección de
la Reina del Carnaval en un acto por jurado, que integraron autoridades de la
comisión, comunales y vecinos. También se realizaría un Baile Oficial en el
Salón de Fiestas del Palacio Municipal, la primera noche, el “Baile de Disfraz
y Fantasía”, dando inicio a la serie de actos programados por la Comisión de
Festejos de la Municipalidad de 25 de Mayo. Para este año la instalación
eléctrica estaba concluida y se acondicionó el arbolado para no restar
iluminación al desfile.
– EL “RESURGIR” DEL
CARNAVAL VEINTICINQUEÑO. Año 1967…
Era tradición en la ciudad que los días domingo
la Banda de Música Municipal actuara en Plaza Mitre, evento que se suspende
durante los domingos de Corso. Otra de las cosas que aumenta la expectativa, es
el monto de los premios que da a conocer la comisión, también será otorgados
premios estímulo a máscaras sueltas y conjuntos alegóricos. El recorrido por
calle 27 de 10 a 9 y por ésta desde 27 a 32, así tratar de descongestionar el
tránsito y permitir un mejor trabajo al jurado. El mismo estará integrado
además de las autoridades comunales y vecinos por tres miembros de la Comisión.
El día anterior al comienzo de los corsos 25 parece despertar, arriban a la
ciudad numerosa cantidad de viajeros. Tanto en los clubes como en distintas
casas particulares se trabaja sin horarios para ultimar detalles, y ya, la
primera noche, una de las jornadas con mayor cantidad de espectadores, el
Carnaval 1967 se posesiona de 25 de Mayo. Los 4 clubes deportivos pelean
seriamente por el premio mayor. Todos ellos presentan cuadros alegóricos, pero
el mayor interés lo despierta el hecho de ver las primeras grandes carrozas
realizadas en la ciudad, en las que cada club paseará a su princesa. El cetro
de la Reina es el preciado título que acarrea sana rivalidad. Las confiterías,
restaurantes, lugares de estar que se encontraban dentro del recorrido, habían
ya acondicionado ambientes cerrados, y se vieron colmadas de público. En la
sede “cebra”, tuvo lugar un baile dedicado al “Mundo de los Niños”, organizado
por las comisiones directivas del Comedor Infantil y del Hogar de Niños Pobres,
el que cobró continuidad en años venideros.
Todas las jornadas concluían con un baile, en
los que además de los tradicionales se hicieron de un “lugar” inamovible, el
“Baile de Todos Disfrazados” -Sportivo- y los bailes de Entrecasa de Argentinos
y Plaza Italia. Gran algarabía, dentro de una muy buena decoración y derroche
de luz, cobro una noche de baile en el Club Social, en donde se dio cita lo
“in” de la sociedad veinticinqueñas. El mismo fue organizado por los
anfitriones con la colaboración del Club de Polo Fortín Mulitas y el Club de
Leones.
Nadie puede negar que en 1967 el Carnaval
“cambió”, realmente uno de “esos” para recordar.
El cierre oficial organizado por La Comisión
Permanente tuvo lugar durante el baile del último sábado en Plaza Italia, donde
su entregaron los premios y se coronó a la nueva Reina del Carnaval.
DE AHORA EN ADELANTE…
Haber llegado a un logro tan importante,
implica, que desde ese momento 25 no puede quedarse quieto, hay que trabajar
conjuntamente en lo que respecta a organización, planificación, creación y
principalmente promoción de los próximos carnavales, ya que deben igualar y
superar ampliamente a los que acaban de terminar. Como iniciativa de la
Comisión, a partir del ’68 las fiestas carnestolendas dan comienzo el día
sábado anterior al domingo. Continuando con las tentativas de solucionar el
problema del tránsito, el recorrido queda dado: de 9 y 27 por la 27 hasta la
10, por esta hasta 31, por 31 hasta 9 y de ahí por calle 9 al punto de partida.
El tramo comprendido desde 10 y 27 hasta 10 y 31, contará con menos iluminación
que el resto del recorrido. Por primera vez, se mandan a confeccionar carteles
que anunciaban las fiestas veinticinqueñas. De acuerdo a lo vivido en 1967 y
demostrando haber entendido el esfuerzo que lleva la preparación de los
distintos números, la comisión aumenta extraordinariamente el monto de los
premios. Al finalizar los corsos serán elegidas dos reinas, una durante el
recorrido y la segunda, Reina del Carnaval Oficial, de la que se conocerá el
nombre en el transcurso del último Baile Oficial a realizarse en el Club Plaza
Italia al dar por finalizado el Corso Oficial. Durante las noches de corso se
puede observar que el público en general hace más de espectador que de actor en
el horario de las fiestas. La cantidad de carrozas y comparsas que desfilaron
superaron ampliamente la cantidad esperada. En la sede “cebra” se llevan a cabo
dos exitosos bailes infantiles, en los que se otorgan premios. La suma
recaudada para los premios oficiales oscila el millón de pesos, importantisimo
récord. Terminado el corso, se puede hacer énfasis al apoyo brindado por la
población a través de las instituciones sociales y deportivas. Dos de dichas
instituciones, Alumni y Sportivo, elevan nota a la Comisión, solicitando que en
años venideros la sede de los Bailes Oficiales sea rotativa, no sólo Plaza
Italia, dando posibilidad a los demás clubes de integrarse y crecer. El carnaval
de 25 de Mayo pasó a ser una “creación” a medio camino del éxito, por lo que no
puede saber de fracasos. Las instituciones fueron quienes jerarquizaron el
inicio de esta etapa sin precedentes en lo que a corsos se refiere. De ahora en
más, deben unificar los esfuerzos para coronar el triunfo definitivo, así tener
la satisfacción de elevar a su ciudad a todo el ámbito de la provincia y por
que no, de la nación. Desde 1967 en adelante, los corsos veinticinqueños
traspasan los límites del partido ampliando la proyección de las fiestas en el
ámbito geográfico. Varias localidades del interior y también ciudades vecinas
confirman su participación en los próximos carnavales. La Comisión pretende dar
un impulso inigualado a los Carnavales ’69, razón más que suficiente para
realizar una muy buena promoción zonal. Además, la expectativa de una masiva
presencia de público reclama suma seriedad en la organización. Un logro
inesperado para sus integrantes fueron las donaciones voluntarias, recibidas de
parte de diversos comercios de calle 9.Días próximos al inicio se dan a conocer
los puntos más importantes, los corsos tendrán lugar durante 6 días del mes de
febrero, habrá dos bailes oficiales, el primero en Plaza Italia -primera noche
de corso- y otro en la sede del Club Argentinos el último día, durante el cual
se coronaran las reinas de corso y bailes, además de hacer entrega de los
distintos premios, los mismos alcanzan una cifra récord en el ámbito zonal en
cuanto a festividades populares. Tratando de evitar inconvenientes a la hora
del desfile se acuerda el recorrido: desde calle 10 y 27, por 27 hasta calle 9,
continuando por ésta hasta calle 34, lugar desde cual se emprenderá el regreso
hasta el lugar de inicio por la mano contraria.Un punto importante para las instituciones
es que se acuerda que todas las carrozas y motivos, se deben presentar desde el
primer día y por lo menos cinco de las seis noches de carnaval.
1969 es el año inaugural del Alumbrado a Gas de
Mercurio sobre calle 9, hecho consumado en las fiestas carnestolendas. Como es
de esperar, la primera noche se da un éxito total, luego del corso la cita es
Plaza Italia para el primer Baile Oficial, sede que también inauguraba su
iluminación con gas a mercurio. La noche siguiente se dio una “monstruosa” manifestación
popular. Los hoteles de la ciudad se hallaban colmados de viajeros, obviamente,
estos hechos traen como consecuencia la inevitable ampliación del recorrido,
para superar los obstrucciones provocados por la afluencia de público nunca
alcanzada hasta el momento, por lo que a partir de la segunda noche se realiza
por una sola mano, dando la vuelta por calle 10, desde 27 a 32.Los disfraces
originales son verdaderas atracciones que dan vida a estos corsos. También se
presentaron motivos que trajeron a la memoria los carnavales de décadas
pasadas, carrozas adornadas con grandes hojas de palmeras y transmitiendo
alegría sin parar. El carnaval se convirtió en una serie de jornadas a las que
el ciudadano común aguardaba impaciente para disfrutar unas horas de olvidos y
distracción, de acción o de recuerdos.
El carnaval no es de uno solo, ni de las 5
instituciones que hacen el esfuerzo mayor para llevarlo a cabo, sino, de toda
la comunidad veinticinqueña…
EL TRABAJO ORGANIZADO Y
SOLIDARIO MUESTRA VENTAJAS…
En el transcurso de estos años la caída de los
corsos se da, principalmente, a consecuencia de la situación económica del país
y por el escaso monto que se otorgaba en los premios. Razones más que
relevantes para que la población pierda el interés en los mismos.Si para las
fiestas de 1966 la Comisión logra el apoyo necesario de vecinos y comercios,
puede iniciarse una gráfica ascendente. Al momento de ultimar los detalles de
la programación da a conocer algunos cambios en cuanto a años anteriores: tendrán
lugar 5 corsos oficiales y uno infantil a desarrollarse uno de esos 5 días en
horas de la tarde. El problema del recorrido es algo difícil de solucionar,
trayendo a cuestas el fracaso del año anterior al hacerlo por 2 calles
distintas, se opta únicamente por la calle 9. El anuncio mejor recibido fue el
monto de los premios, el cual se incrementó notablemente, siendo en ese momento
cifra récord en la historia de cualquier actividad social en esta ciudad.
También se ayudaría a los clubes que lo requirieran, para solventar los gastos
en carrozas, comparsas, etc. Como consecuencia de la cantidad de infracciones
labradas anteriormente, la comisión determina a partir de este año, nombrar un
Comisario de Corso, tratando de solucionar problemas de ordenes y contraórdenes
que se venían sucediendo durante las horas de desfile.Muy positivo resulto el
hecho de que distintas localidades del interior del partido se sumaran a las
fiestas a realizarse en 25 de Mayo.El día de apertura, debe suspenderse la
primer noche de corso y bailes por lluvia. Pero, para sorpresa de la mayoría,
la ahora Comisión Permanente de Carnaval y Festejos decide respetar la cantidad
de noches de corsos oficiales por lo que habrá carnaval la semana completa,
pero como el miércoles corresponde al Miércoles de Ceniza, se opta por realizar
ambas fechas a principios de marzo, ya extendiéndose un fin de semana.El último
domingo de Corso se hace la entrega de los premios a las distintas categorías y
se conoce el veredicto del jurado con respecto a la elección de la Reina en el
Palco Oficial, ubicado en calle 9 entre 27 y 28. Posteriormente, y para
despedir a éste Carnaval que en general dejo un balance positivo, a las 0,00hs.
todo el público se congrega en 10 y 29 para asistir a la quema del Rey Momo.
El lema es ya meta entre los habitantes de este
suelo: “25 de Mayo, Ciudad del Carnaval” y a él, se debe aferrar la conciencia
de quienes pueden hacer de estas jornadas una fuente más de turismo, como forma
incluso, de ingreso económico.
1970 viene acompañado de nuevas y productivas
ideas para el desarrollo de los mismos. Las calles que correspondan al
recorrido estrenaran ornamentación que agregue color y brillo, mascarones
iluminados utilizados por primera vez para este fin y confeccionados
especialmente se colocarán a lo largo del mismo. La iluminación recibirá
mejoras, además de utilizarse lámparas a gas de mercurio blancas y de colores
que prestará la municipalidad. También se ubicarán altavoces en todo el
trayecto para mantener informado al público y animar el desfile.
FIESTA DEL CARNAVAL DEL
CENTRO DE LA PROVINCIA DE BS. AS EN LA CIUDAD:
Como iniciativa de esta comisión, a partir de
estos carnavales, tendrá lugar en la ciudad de 25 de Mayo una nueva fiesta: La
Elección de la Reina del Carnaval de la Zona. Algunas de las ciudades visitadas
dijeron si, no sólo a concurrir a los corsos y presentar a sus Soberanas, sino
que a su vez, ofrecieron traer carrozas para el desfile de las princesas. Según
acuerda la comisión el recorrido será: de 10 y 27 por 27 hasta 9, por 9 hasta
la 36, emprendiendo desde dicha esquina el regreso hasta el lugar de partida.
Un total de 20 cuadras!!
La primer noche de corso, tanto el desfile, como
los disfraces, bailes y confiterías estuvieron a la orden del día. Aunque, como
era previsible, no se presentaron las carrozas de los principales clubes,
excepto Plaza España: “Mascarada”, una original interpretación del carnaval,
viviéndolo dentro de esa entidad, no una imitación de lo que es el carnaval.
Luego del corso, se lleva a cabo el Primer Baile Oficial en el Club Sportivo,
para recaudar fondos y así poder solventar gastos de éstas fiestas, actuaron:
Los Platinos.
LOS CARNAVALES DE 25 DE
MAYO INICIAN LA GESTACIÓN DE UN SUEÑO PARA LA CIUDAD: El Miniturismo
Con el estruendo de la tradicional bomba, a
fines de Febrero de 1971, inicia un nuevo carnaval. El conjunto de luces,
música, alegría y color conforman un todo que brinda a la masa de visitantes un
espectáculo inolvidable. El recorrido determinado es: de la esquina 10 y 27, por
27 hasta 9, por esta hasta 33, lugar desde donde se retornará al punto de
partida por la misma arteria en doble mano.
Desde la primer noche se observa un crecido
número de público. En el desfile están presentes todas las carrozas, que
muestran en general gran calidad. Han superado la etapa del vehículo
descubierto y en cuanto el elemento de tracción se lo logre integrar al
conjunto, lograrán todo el esplendor para ser las mejores. Es de destacar la
contribución de los distintos clubes deportivos, como así de las entidades
sociales. Alumni, en su carroza “El Verano de los Corsarios” pasea durante
todas las noches a los pequeños del Hogar de Niños.
No se ven comparsas, y es notable su falta, como
también la de disfraces originales y máscaras sueltas, que son las que agregan
maraña y entusiasmo. Igualmente, nadie se retiró desconforme. Infaltables las
murgas, cada una haciendo lo suyo: Plaza Italia núcleo a los mejores músicos
locales especialistas de bandas. Una grata novedad estuvo dada por el Centro de
Estudiantes Veinticinqueños residentes en La Plata, quienes presentaron carroza
y un palco con cuidada ornamentación.
Un hecho relevante fue, que a pesar de la falta
de participantes, la Comisión de Festejos no acepta la presencia de 2 números
foráneos, que pretendieron firmar contrato para asistir a estos corsos,
demostrando defender la originalidad del trabajo local. Todos los bailes,
incluidos los oficiales, se vieron repletos, como también las confiterías
bailables locales destinadas a los diferentes gustos del público, preparando
alegría y diversión en el juego con espuma. Las jornadas terminaban
invariablemente ya casi de mañana.
Para la Elección de la Reina Local se invita a
las princesas a un lunch realizado por la Comisión de Festejos en el Palacio
Municipal el día anterior al desfile, ocasión para tener el primer contacto con
los integrantes del jurado. El Baile de Coronación se realizará en las
instalaciones del Club Argentinos, oportunidad en la que, como años anteriores
se entregarán los distintos premios del corso.
La última noche tuvo rotundo éxito, tanto en el
cierre de este carnaval, durante el cual se quemó a Rey Momo en la esquina de 9
y 27 con una concurrencia imponente, como en el Baile Oficial donde se elegirá
la Reina del Carnaval Veinticinqueño.
El punto negativo de las 6 noches de fiestas lo
puso el recorrido, resultando un verdadero desastre el aglomeramiento de
tránsito.
La realidad local como fuente de miniturismo es
positiva, debe y tiene que comenzar a canalizarse. Durante los días de corso,
se observaron más de una docena de carpas en el Parque Mulitas como respuesta a
la difusión que se dio para estas fechas, la capacidad de los hoteles también
se agotó.
Resultó uno de los carnavales más importantes
hasta ese momento en la historia de 25 de Mayo, dada la trayectoria turística
que inició. Queda la impaciencia por la 2ª Edición de la Fiesta del Centro de
la Provincia, que por suerte no dura mucho, dejando como saldo el éxito tan
ansiado y esperanzador para el trabajo a realizar mientras se espera el año
entrante.
PROMOCIÓN EN EL ÁMBITO NACIONAL
25 de Mayo ya conoce lo que es una etapa de
preparación en cuanto a cómo promocionar en el ámbito nacional este evento. La
campaña 1972 debe superar a las anteriores. Para lograrlo, la comisión empieza
tempranamente sus tareas. Así, licitan la venta para el expendio de la nieve,
en cuyos tarros estará la inscripción: “25 de Mayo, Ciudad del Carnaval”,
también se realizan calcomanías con el mismo lema para repartir entre todos los
vecinos a fin de exponerlas en sitios visibles.
Se contrata publicidad con B.B. Publicidad de
L.S.4 Radio Continental para la promoción oral del evento en el ámbito
nacional. El presidente de la comisión, viaja expresamente a contratar números
reconocidos para la Fiesta del Centro de la Provincia.
Todo ciudadano veinticinqueño guarda la
esperanza de que 1972 forme definitivamente lo que es el futuro de los
carnavales en esta ciudad.
Este año trae un nuevo cambio de recorrido:
desde 9 y 28 hasta 10, por 10 hasta 32, girando en un mismo sentido hasta el
punto de origen. La iluminación del mismo resulta abundante y se observa gran
caudal de comparsas, murgas y carrozas. Estas últimas quedaron muy bajas a
causa de la baja altura que están colocadas las lamparitas y guirnaldas que conforman
la ornamentación -algo para reveer- independientemente, llamó mucho la atención
que presentaran gran igualdad en la calidad de las mismas.
Se observaron varios motivos sueltos como una
Fragata Sarmiento – viajó desde Chacabuco- un avión llegado de Carlos Casares,
la murga de Alumni, un jeep muy bien adornado de Don Luis Reggiardo, y muchos
más, todo echo por “el pueblo”, la alegría de la gente, dando vida a una gran
fiesta popular.
La ampliación del recorrido fue significativa,
permitiendo así, mayor fluidez en el desplazamiento y más agilidad en el
espectáculo. Todo el conjunto hizo posible que el primer lunes de corso fuera
filmado por enviados de Canal 2 de La Plata. Durante las jornadas iniciales se
presentaron inconvenientes aislados, que se superaron a la brevedad gracias a
la efectiva actuación de miembros de la comisión. La vida nocturna estuvo a
tono con las grandes ciudades. Plaza Italia, Sportivo, Argentinos, Ritrovo,
Yakuma, se colmaron de personas en todos sus rincones al terminar cada noche.
En 1972 no hubo más que otros años, sino menos,
pero por eso no se puede decir si resultó superior o inferior, el gran esfuerzo
de los clubes deportivos posibilita el éxito y la trascendencia nacional de
esta ciudad. Superar esquemas ya realizados es un desafío muy grande, que a
veces no se puede o no se sabe alcanzar.
La fiesta final, se desarrolló en sede de Plaza
Italia alcanzando límites no esperados, contó con la presencia como invitada
especial de la Reina del Mar, el público no podía fallar y acompañó cada parte
del evento. A mediados de Marzo, luego de varias postergaciones, se concreta el
“Corso de Nieve”, que no resulta acompañado por el clima frío para el juego con
espuma, aunque si atrae la atención del público la quema de Momo a realizarse
en 9 y 27 alrededor de la medianoche, finalizado el corso.
El carnaval y la fiesta del Centro de la
Provincia se “mantuvieron”, deben buscarse innovaciones en pos de avanzar a la
provincialización. En los próximos meses ya deben trabajar consciente en una
planificación comunal y organización conjunta de los organismos encargados de
fiestas y miniturismo, pensando en el año entrante.
Este “carnaval moderno”, esta por arribar a sus
primeros 10 años, en contra de las perspectivas no es demasiado el adelanto mostrado,
se ha dejado diluir el esfuerzo de “aquellos pocos” que hicieron tanto. Los que
por estos años manejan las “cosas”, están solos, no cuentan con medios
económicos que garanticen aunque más no sea, las inversiones imprescindibles.
Las autoridades municipales deberían otorgar la autonomía suficiente a la
Comisión de Festejos para realizar cómodamente su trabajo.
A pesar de todo, los que la conforman en 1973,
no bajan los brazos y preparan los corsos, para lo que cuentan con escaso
tiempo, ya que las fiestas fueron adelantadas a causa de una decisión política.
Dentro de sus primeras acciones se contrata a un
arquitecto decorador brasileño, para que realice una original y llamativa
decoración del recorrido- costó, pero se hizo- también adquieren un nuevo
equipo de sonido que lleva una importante inversión, por lo que se espera que
los resultados sean los mejores.
Los clubes en conjunto, elevan nota a la misma,
solicitando un aumento en el monto de los premios para poder mejorar la calidad
de sus presentaciones. Paralelamente, esta entidad trabaja en la promoción de
la próxima Fiesta del Centro de la Provincia, aunque demasiado lento. No hubo
la antelación de otros años ni siquiera en el ámbito local, donde la propaganda
comienza a una semana de los corsos.
Dentro ya de estos carnavales- duraron 6 noches-
el pueblo es el verdadero hacedor del espectáculo, como actor y espectador
vuelve a volcarse a las calles y salvar con su alegría que debió ser organizado
y coordinado. La noche inicial se vio opacada a causa de una gran tormenta que
dejó luces y adornos rotos. Pero estos detalles negativos ni se vieron gracias
al fervor y entusiasmo de los visitantes frente al magnifico espectáculo.
La presentación de las carrozas resultó
brillante, cada institución dejó volar su imaginación y resultaron novedosos
motivos. También participaron varios y alegres motivos sueltos locales y
forasteros.
Las comparsas no fueron muchas en cantidad pero
se llenaron con su esplendor y calidad. Al igual que la tradicional Murga
formada por músicos locales. En el primer baile de Plaza Italia se presenta-
por 2ª vez en 25- el cantante Sergio Denis. El carnaval ’73, moviliza solo en
los bailes entre 5 y 6 mil personas, haciendo de estos corsos una indudable
realidad de éxito, dando a los mismos la trascendencia que buscaban desde hace
tiempo. En el final, el público mostró su descontento al momento de la entrega
de premios, considerando desacertada la decisión del jurado- Comisión de
Festejos- en el reparto de los mismos, ya que no había casi diferencia en los
montos. Además tampoco sirvió el nuevo equipo de sonido.
La madrugada daba su adiós a la Fiesta Final
edición 1973, con fallas, y con lo incontrastable de un evento que le pertenece
a 25 de Mayo, porque lo gestó su pueblo con el apoyo de los partidos vecinos y
el nuevo día, arribó con el pensamiento puesto hacia el futuro.
1974 llegó de la mano de una nueva Comisión,
algo rutinario en la parte organizativa de estos corsos, a éste cuerpo
institucional lo conformaron hombres con la experiencia necesaria en el manejo
de las fiestas.
Iniciando sus tareas, se da a conocer las
novedades y cambios para los corsos venideros. A partir de ese momento, hubo
detalles que tenían su vigencia y continuaron así, otros nacieron para crecer
mediante el Reglamento General de Participación en Corsos Oficiales 1974, el
cual, entre sus puntos indicaba que dicha comisión no formaría parte del jurado
para la elección de los premios del carnaval local, éste estaría integrado por
2 expertos locales- un arquitecto y un escenógrafo- y 2 miembros de la
Dirección de Cultura de la Ciudad de La Plata. Abrieron las puertas a todos los
grupos que quisieran y pudieran participar del corso, además de los clubes
deportivos, se dio lugar a particulares, cooperadoras escolares, instituciones
sociales, culturales, pudiendo ser del interior del partido ajustándose al
nuevo reglamento. Con respecto a las carrozas, debería primar la mano de obra
personal de la institución representada y adaptarse a determinado tamaño- no
pasar más de 4 metros de altura -. Las comparsas serían de 60 integrantes como
mínimo y las murgas, un mínimo de 30 músicos interpretando la música en vivo.
Para acreditarse cualquiera de los premios, se debió dar el presente las 6
noches de corso con 3 vueltas al recorrido en cada una, además de participar el
día de la fiesta final con un mínimo del 70 % de sus integrantes.
CAMBIOS Y SORPRESAS:
“Carnaval de Antaño”…
Para lograr mayor realce se cambió casi por
completo la ornamentación en las calles, instalando muñecos en las columnas de
alumbrado. Paralelo al trabajo de organización local, la comisión continuó los
tramites para oficializar la Fiesta final.
Los comercios comprometieron con anterioridad,
ayuda económica a fin de efectuar una buena promoción en el ámbito nacional. La
institución “cebra” (Club Sportivo) dio a conocer que no estaría presente en la
edición 74 de los corsos, y se da la primicia de la realización por primera
vez, de una noche de corso con el nombre “Carnaval de Antaño”- teniendo lugar
la última jornada, antes del baile oficial de coronación de la reina local -,
en el que se presentaron carruajes y automóviles hasta el modelo 71-. Durante
estas fiestas, pudo observarse una mejora de la organización, que demostró un
avance en su esquema de manejo, la creación de un jurado semi-permanente dio
señal de estabilidad, se ve elevado el nivel en iluminación, sonido,
ornamentación y recorrido. Aunque sigue la falla de dejar la música general en
los altoparlantes ante el paso de conjuntos con música propia.
Los carnavales se superaron día a día. Se
pudieron ver en carrozas, “Fantasía en el Mar”, Club Alumni, “Fantasía Hípica”,
del Club Plaza España y “Los Dragones”, carroza que presentara el club
Argentinos, los dos inmensos dragones despedían lenguas de fuego junto a un
rugido que hacia vibrar al espectador, trabajo que se acreditó el 1º premio
desde la primer noche con voto unánime. Las comparsas no fueron inferiores.
Máscaras sueltas hubo pocas.
En la parte bailable continuaron los
tradicionales de cada club y los dos oficiales, en Alumni se hace presente
durante una de sus noches Cacho Castaña. El “Corso de Antaño”, novedad que
acarrea gran expectativa, puso una nota diferente a los carnavales y llevó a
muchos por los caminos del recuerdo. Se perdió el acartonamiento y se privó de
lo estético, pero resultó la alegría auténtica y simpática de la “fiesta
humilde”. Realmente un gran “espectáculo”.Se representa en la ciudad, la 1ª
Fiesta Provincial.
PROMOCIÓN EN TODOS LOS
ÁMBITOS…
Finalizados estos carnavales, quedaron muchas
cosas para rever y tratar de mejorar.
En el transcurso 1974-1975 gente de la Comisión
Veinticinqueña viaja a Capital Federal para presentar en la Casa de la
Provincia, lo hecho hasta ese momento con relación a los corsos y los proyectos
a futuro, a fin de captar la atención de las autoridades provinciales.
Se trabajó sin descanso en la promoción local,
provincial y nacional, para lograr el éxito en la edición 75, fechas que marcan
verdaderos movimientos masivos de público local y turista.
Por intermedio del Sr. Carlos Muniagorri
-presidente de la asociación de ex residentes de 25 de Mayo en Bs. As. y
funcionario de Radio Rivadavia- se logro intensificar los contactos en Capital
Federal para la publicidad oral. La cuál se emitió por radios Continental y
Rivadavia. También hicieron promoción radios de los partidos vecinos y por
primera vez se contrata un avión para repartir panfletos alusivos sobre todo el
territorio de la provincia. Con el fin de aumentar la recaudación de fondos
para solventar los gastos esenciales, integrantes de la comisión ofrecen
publicidad oral a los comercios situados en calles 9 y 10 correspondientes al
recorrido, de los 30 existentes, solo 10 aceptaron.
La Municipalidad, por decreto, otorgó a la
Comisión amplias facultades en cuanto a los aspectos de la comercialización de
todos los productos relacionados con las fiestas y con respecto a la toma de
decisiones y resoluciones durante el espectáculo.
Continuando con la promoción, se realizó en esta
ciudad una Conferencia de Prensa a cargo de los integrantes de la Comisión y
autoridades comunales, para periodistas de la zona y Capital Federal,
obteniendo muy buen eco en el ámbito nacional. Durante el año, habían surgido
en 25, empresas particulares, las cuales ofrecían paquetes turísticos
promocionando la “Ciudad del Carnaval”, como por ejemplo, Agustín Farace y Cía.
Inesperadamente, pero no ilógico, el 31 de Enero del 75- a 2 días del inicio de
los corsos- se hace una reestructuración de la Comisión, manteniendo en su
lugar al anterior presidente- resolución lógica -. Las autoridades decanas
anunciaron su no-participación, dejando una expectativa de vacío muy grande.
Con las horas contadas se dieron a conocer las
decisiones ya tomadas de mayor relevancia: no se cobraría entrada ninguna de
las noches de corso, los cuales comenzaron a principios de febrero, siendo
obligatoria la presencia de todos los números ese fin de semana. Quedó
estipulado en forma fija el recorrido del desfile por las calles 27 de 9 a 10,
por 10 hasta 31, 31 de 10 a 9 y por 9 hasta 27, permitieron también la
instalación de parrillas a lo largo del mismo. El estacionamiento debía hacerse
2 cuadras antes de recorrido, sobre las transversales y en una sola mano
estacionando a 45º, lo que facilitó la circulación y el no congestionamiento.
Para los motivos y participantes hubo 2 entradas esquinas de 10 y 27 y 9 y 31.
Los Corsos de Antaño, desde ese año, se realizaron durante 2 noches.
Dado el resultado de la promoción realizada, fue
creado en el Palacio Municipal un Registro de Alojamiento donde se anotaron
aquellas familias que podían dar hospedaje.
Llegó el momento esperado, primera noche de los
carnavales 75, frente al palco oficial se ubicaron varios medios de prensa
foráneos: Radio Chivilcoy, Canal 2 de La Plata, Canal 7 y Radio Rivadavia
transmitiendo flashes en directo. Días posteriores salió publicada una nota en
Diario Clarín.
Igualmente pudo apreciarse la alegría y calidad
de los distintos cuadros y motivos que dieron vida a las noches de 25. En
Murgas, se creó por iniciativa de la comisión, una Murga Libre, en la cual se
anotó todo el que quiso participar. En comparsas se presentaron motivos muy
originales. Las distintas carrozas mostraron el tradicional esfuerzo y tiempo
puesto en sus trabajos, cada entidad dio pauta de gran originalidad. Varios
motivos originales complementaron el desfile, no sí las máscaras sueltas. En el
transcurso de estas fiestas, la comisión propuso realizar un “Corso de Nieve” a
efectuarse durante la jornada de un viernes, en cual se podía participar
disfrazado, a los que se les entregaron trofeos.
Estos carnavales supieron combinar muchos
factores en contra, hechos que hacen mejor a los organizadores. El último fin
de semana se realizó el esperado Carnaval de Antaño, para el que ya se habían
estipulado premios a repartir entre los participantes, con la condición que se
acreditarían a todo el que se presentó en ambas noches. Hubo comparsas, varios
y originales motivos en carruajes y autos muy bien ornamentados. Todos
transmitiendo alegría a granel.
Muchos turistas aceptaron la invitación de
conocer la ciudad, la capacidad hotelera se vio rebasada, en el Parque de la
Laguna se pudieron observar alrededor de 20 carpas. Algo sumamente
positivo.Desde ahí, todo el pueblo de 25 de Mayo debió tomar conciencia y
preocuparse por el “no fracaso” de “esto” que le costó 10 años cimentar, además
de la parte económica, se perdería el prestigio logrado en el ámbito nacional y
el peor daño, cortar la tradición.
El año siguiente- 1976- llegó con nueva
comisión: Subcomisión Especial del Carnaval- dependiente de la Municipalidad.
Gran parte de las disposiciones ya vigentes continuaron, se agregó alguna
modificación indispensable.
Los clubes, junto a autoridades comunales y
privadas, trabajaron unidos. Algunos puntos organizativos variados fueron: las
vueltas obligatorias al recorrido pasaron a ser 2 cada noche. Se otorgó a las
instituciones un monto básico por adelantado a cuenta de los premios, para la
preparación de los motivos. Hubo cestos a lo largo del recorrido para tirar los
tarros de nieve vacíos, cada cesto fue a una entidad de bien público, la cual
vendió los tarros para obtener fondos.
– Nuevas pautas para calificar a los participantes.
Se le entregó al jurado una Tabla de Evaluación, con la cual debían evaluar a
los participantes, para conjuntos: vestuario, sonido, ritmo, color y
ambientación; carrozas: una parte artística- diseño, color, iluminación y
prolijidad- y una parte técnica- vestuario, trabajo, iluminación y prolijidad-.
Las fiestas comenzaron a fines de febrero del
76. Como en ediciones anteriores, hubo ausencias notables y el clima tampoco
quiso acompañar a estos carnavales. Se observaron alrededor de 7 carrozas, comparsas,
motivos originales- 4 de los payasos fueron contratados por la comisión -, y
diversos cuadros más aunque faltaron las murgas bien organizadas restando el
fervor propio de ellas. Se vieron sí, muchas presencias nuevas. Lamentablemente
los carnavales sufrieron un paréntesis a causa de un tornado que azotó la
ciudad, dejando muchas pérdidas materiales. Los turistas no “achicaron” y
continuaron dando el presente cuando se reanudaron, aportando su alegría y
entusiasmo.
Recorrió el desfile “El trencito de la
felicidad”, una pantera, un puma, un perro y un oso pertenecientes al Sr. Juan
Bazan y los payasos Rulito, Rulete, Mequetrefe, junto con el mago Alberto y
Blackaman, pusieron una nota diferente. Los conjuntos y comparsas dieron
muestras de esfuerzo y dedicación. Peña mi Rincón y el Ballet Folklórico 25 de
Mayo, mostraron al Carnaval Norteño, Peña El Fortín, al Carnaval Correntino,
vecinos de La Cañonera armaron con 30 pequeños una hermosa “Fantasía Norteña”.
“Payasada” resultó la comparsa ganadora, en la que iban patinadores, ciclistas,
cabezones, en total 120 personas presentadas por el Club Argentinos. Dentro de
los motivos originales, se vio al Sr. Modesto Peki, transportando un cuadro
interpretado por los pequeños del Hogar de Niños: “En Alta Mar”. La cantidad y
calidad de carrozas no resultó menor, “Fantasía en el Parque” presentaba dos
enormes cisnes, a los cuales se les debieron colocar las plumas una por una-
Plaza Italia-, además, Alumni, Juventud con Peña El Fortín, Club de Pesca,
Escuela de Danzas El Malambo, los vecinos de 3 y 24, el Club Municipal y
Argentinos también mostraron sus fantásticas artesanías carroceras. El primer
puesto fue compartido entre decanos e itálicos. Las dos noches de corsos de
Antaño brillaron en todo su esplendor. El ritmo del desfile y la cantidad de
cuadros fue incesante. El público fue numeroso y se jugó mucho con espuma. Al
finalizar la última noche tuvo lugar el baile de coronación de la reina local,
siendo electa la Srta. Graciela Lavítola, representante del Club Argentinos.
Cerraba así otro capítulo en la “Ciudad del
Carnaval”, que resultó altamente positivo, el promedio de espectadores por
noche, rondó los 7 mil.
– Gracias a la comuna, turistas pudieron
hospedarse en el Hogar de Ancianos, Dependencias Municipales y muchas casas de
familia, además de las carpas en la Laguna.
– El 50 % de las fiestas se financió con la
venta de espuma, manejada por la comisión. Solo restaba aguardar que la Fiesta
Provincial coronara los hechos. BANDA INFANTIL MUNICIPAL
Seis meses antes a la Edición 1979 de los
Carnavales veinticinqueños, se comenzó a formar un grupo de niños y
adolescentes, que, bajo la dirección del Tte. Pro. Emilio Alberto Sobrino
lograron el milagro de transformar sus juegos en música.
El Tte. Sobrino, es una persona de 38 años de
edad- en 1979- de los cuales 20 lleva dedicados a su profesión, la cual, según
sus propias palabras “es la razón de su existencia”.
Los integrantes eran niños y jóvenes entre los 4
y 12 años. Detrás de ellos, existía la comisión de padres, encargada de todo
aquello que fuese necesario para recaudar fondos, tanto para instrumentos,
vestimenta, accesorios, viáticos. Contó con todo el apoyo que la comuna pudo
brindar, la cual, hizo entrega por intermedio de un decreto, de un subsidio para
la compra de todos los uniformes necesarios.
Hicieron su debut durante los corsos 79, pero la
finalidad era con miras a más, convertirse en un cuerpo estable para la
amenización de fiestas patrias y populares y realización de recitales.
Lo cierto fue, que esa noche de sábado se
convirtieron en “pequeños héroes dignos del bronce”, y desfilaron con su música
durante más de 2 horas- tiempo tardado en completar el recorrido del corso-
vestidos uniformemente con el detalle de una juvenil boina, seguidos todo el tiempo
por una multitud que los ovacionaba.
Esta banda resultó ser un hecho educativo de
grandes proporciones, siendo de significativo orgullo para la ciudad y
excelente embajadora en todos los pueblos de la provincia que visitó, ya que
invitaciones no le faltaron.
GUARDIA DE 25 DE MAYO:
LAS FORTINERAS
La tradición ha impuesto que toda soberana tenga
su guardia. En Argentina la de mayor trascendencia ha sido siempre la Guardia
del Mar.
Alrededor de 1976, la Comisión de entonces,
presentó la idea de crear la Guardia de 25 de Mayo, cuya misión principal
recaería en escoltar a la Reina Provincial del Carnaval. A principios de 1979,
dicha idea, cumplía 6 meses de vida, durante los cuales se trabajó a todo
pulmón en distintos grupos abocados a la misma. Por un lado, la Comisión de
Festejos logró el apoyo de la profesora Marita Cánepa de Ravina -especialista
en danzas- y el Sr. Dardo Rovera -en música de percusión- para la preparación
del grupo artístico. Paralelamente se formó la Comisión de Padres, encargada de
llevar adelante toda iniciativa que pudiera brindar fondos para solventar los
gastos del grupo. Asimismo, el gobierno municipal no dio la espalda en ningún
momento, aportando tanto en la parte económica como todo lo que pudiese brindar
la Dirección de Cultura.
Gran trabajo fue el de los profesores Cánepa y
Rovera, fuese en la selección de coreografías y músicas adecuadas para cada
presentación, como en la elección y preparación de chicas -para la parte baile-
y muchachos -para la percusión- logrando unir la plasticidad y el orden. Para
integrar el grupo debían tener entre 15 y 22 años, lo que obligaba a una
constante renovación del plantel. Los ensayos eran realizados en el salón de
actos del palacio municipal.
El debut se realizó el 8 de Noviembre de 1978, en
los festejos de un nuevo aniversario de la ciudad. Luego, en los corsos 79, fue
la segunda presentación oficial de la misma, en el cuál se pudo observar que el
número de integrantes había aumentado, también el vestuario se modificó acorde
a las fiestas. El ritmo contagioso de las jóvenes, la percusión ejecutada a la
perfección y la variante de un grupo de chicas portando panderetas, puso en
este grupo el broche de distinción. El saldo conseguido fue doble, la
aceptación y ovación del público en general y la satisfacción propia de cada
uno al poder demostrar la disciplina y amistad que los unía.
Un desfile como pocos que honró a la ciudad de
25 de Mayo. La Guardia era digna embajadora en todo lugar visitado. Todo estaba
en marcha, el futuro dependía de 25 de mayo.
EL CARNAVAL DURANTE LA
POLITIZACIÓN DEL PAÍS
Se comenzó a desandar el camino de los
siguientes 360 días, pensando que las fiestas de 1977 deberían ser perfectas.
Pero… por cábala, el nuevo año se presentó con nubarrones para la Comisión Interclubes,
como resultado de la siempre existente burocracia gubernamental,
administrativa, legal, etc. En este caso, por haber quedado pendiente, -durante
el cambio de autoridades comunales en marzo de 1976- detalles administrativos
anteriores. Esos fueron los años de la politización argentina y el carnaval,
“no zafó”. El nuevo gobierno privatizó toda empresa que acarreara déficit, los
corsos 75 dieron pérdidas, en el 76 quedaron premios “colgados”, el carnaval
veinticinqueño no fracasó porque los clubes siempre estuvieron presentes.
COMISIÓN INTER-CLUBES:
“LOS PADRES DEL CARNAVAL”
Desde ese momento, las autoridades deportivas se
nuclearon para realizar los corsos bajo su responsabilidad y organización.
Independientemente, la comuna mantuvo su palabra, incluyendo dentro del
presupuesto ´77 un subsidio para dicha comisión, además de entregarle las luces
del recorrido, el equipo de sonido con los altoparlantes, etc.
Se conformó una Comisión Encargada de las
Fiestas del Carnaval, presidida por el Sr. Aidor Miranda -electo por los
presidentes de los distintos clubes- quién debía “dirigir” una empresa que
tenía como único destinatario a 25 de Mayo, nombrando al Sr. Salvador O.
Passarini, secretario administrativo de la misma. Las primeras resoluciones
tomadas fueron en torno a la cifra total a entregar en premios, la que se fue
repartiendo por adelantado, en forma proporcional según lo recaudado, a los que
intervenían 1ª las carrozas y 2ª las comparsas.
Se contrataron conjuntos musicales para los
diferentes bailes en las sedes deportivas, los que rotaron una noche en cada
una. Las recaudaciones de todos los bailes, fueron a un pozo común,
repartiendose el total en forma igualitaria al finalizar las fiestas. También
se comenzó con los contactos para realizar la promoción en los distintos
ámbitos, logrando -por intermedio del Sr. Muniagorri- publicidad oral en las
radios Rivadavia y Continental. Canal 2 de La Plata -convertido ya en portavoz
de la vida comunitaria veinticinqueña- emitió durante un programa de “Esta es
mi Provincia” una sección dedicada al carnaval de 25 de Mayo, en la cual actuó
el grupo “Tres y Uno para el Tango”.
El jurado de los corsos locales se formó con
personas ajenas a la ciudad relacionadas con el arte y la cultura. No hubo
bailes infantiles por razones económicas. La transmisión del corso se trasladó
a la esquina de 9 y 30.
Como cada año, el clima acompañó las noches que
quiso, causando alguna que otra desilusión en el público, que sí dijo presente.
Una de las noches, por temor a lluvias, las carrozas directamente no
desfilaron. A pesar de todo, los Carnavales 1977, se hicieron realidad,
mostrando cosas hermosas y diversas, por ejemplo un inmenso perro de 4 metros
de alto que encabezó el desfile, una caracterización de “El Gordo y El Flaco”
de los Hnos. Moritán, espectacular. Los clubes Sportivo, Alumni, P. Italia y
Argentinos- se acreditó el 1º puesto- presentaron carrozas de excelente calidad
y buen gusto. Las distintas comparsas entregaron todo de sí en alegría y
entusiasmo: “Safari” del Club Argentinos y “Fantasía en Hawai”, del Club de
Fomento y Pesca Laguna Mulitas. Infaltable, una murga en la cual Ernesto Crotti
e Ismael Barbá eran los personajes centrales, “prestados” a Sportivo por P.
Italia y Alumni, respectivamente.
A causa del mal tiempo, los corsos oficiales se
extendieron un fin de semana, lo que llevó a que las 2 últimas noches se
realizaran dos corsos en uno. Primero desfiló el “corso actual” y detrás el de
antaño. El día domingo, fueron divididos por el paso de las princesas veinticinqueñas.
Aún con clima amenazante se calculó alrededor de 20 mil espectadores en total,
quienes lograron que fuese uno de los carnavales más alegres, en el que se jugó
mucho con nieve, las comparsas demostraron verdadera motivación y la gente se
aglomeró. Al momento de conocerse los premios, ya comenzaba a lloviznar, pero
integrantes de las comparsas de Argentinos -ganadores del 1º premio- abrazados
a los del Club de Pesca no paraban de bailar, el público, contagiado, no se
movió. En el Baile Oficial en sede de Sportivo, la gente se dio cita
masivamente, consagrandosé Reina de los Carnavales de 25 de Mayo: Graciela
Castoldi -representante cebra-. La fiesta cobró una animación extraordinaria, y
casi sin darse cuenta nadie, llegó el momento de dar vuelta otra página,
disfrutando las alegrías que dejó la Fiesta Provincial 77.
LOS VECINOS, HACEDORES
DEL CARNAVAL VEINTICINQUEÑO
Con el correr de los días, la Comisión
Interclubes, encaminó sus pasos hacia los corsos del año entrante. Luego de una
entrevista con el Intendente, habiendo sacado los cálculos finales, los
recursos no alcanzaban. Se habló de cobrar entradas, pero la mayoría estuvo en
contra. El presidente de la comisión presenta su renuncia, consecuencia: no
habrá carnaval. Ante esto, Fortaín, junto a numerosos vecinos -Pedro M.
Astigarraga, Pedro Gandarias, entre otros- apoyados por el jefe comunal,
conformaron la “Comisión de Vecinos”, nombrando al Sr. Salvador O. Passarini,
secretario rentado de la misma. Terminados los trámites legales, comenzaron su
tarea: hacer el carnaval. Se envió una gacetilla de prensa a casi todos los
medios informativos nacionales. Directivos de la comisión visitaron los
partidos vecinos para invitar a las Reinas y autoridades a la Fiesta
Provincial.
Los corsos comenzaron a principios de Febrero,
con el apoyo de los clubes socio-deportivos, instituciones de bien público,
artísticas y culturales, comuna, comercio e industria y fuerzas vivas.
Al jurado lo integraron 2 personas enviadas por
la Sub-Secretaría de Cultura de la Provincia y un integrante local. No se dio a
conocer el grupo para evitar presiones innecesarias. Para ayudar a mejorar las
comparsas, se redacta un nuevo reglamento, mediante el cual, éstas, podrían
contar con menor número de integrantes -40 mínimo-, ayudando así, a la
formación de mayor cantidad de las mismas. Los premios serían proporcionales a
la cantidad de integrantes que tuviera la ganadora.
Para armar las carrozas fueron muchos los
vecinos que colaboraron, -artesanos, mecánicos, electricistas, herreros- y
gracias al permanente apoyo del Sr. Muniagorri, Lionel Godoy, dedicó su espacio
radial, de 60 minutos en radio El Mundo, a 25 de Mayo y sus Carnavales la noche
de la víspera al comienzo de los mismos.
Fue así, que al sonar las campanas de las 21,00
horas del 1º sábado, la ciudad abandonó su rutina diaria para “… encender las
luces de una nueva marcha triunfal y justificar la condición de ‘Ciudad del
Carnaval’, la cuál no fue una designación caprichosa dada por un grupo de
fanáticos, sino el resultado de muchas ideas bien trabajadas…”
El recorrido se acortó hasta calle 30, por la
poca cantidad de números a presentarse. Los primeros días, parecía que las
fiestas se derrumbaban progresivamente, se notó mucho la falta de Argentinos,
Sportivo, Juventud y Club de Pesca, pero, pasada la primer prueba, se produjo
un vuelco total y como por arte de magia aparecieron máscaras sueltas por todos
lados, contagiando su alegría y entusiasmo al público. Estuvo presente un
equipo de Mundial Producciones filmando para Canal 2 de La Plata.
ENTIDADES NO DEPORTIVAS
“SE LE” ANIMAN A LOS CORSOS…
Las carrozas presentadas resultaron de muy alta
calidad. Plaza España, mostró un hermoso “Paisaje Helado de las Tierras
Nórdicas”, Peña El Malambo, “La Cenicienta”, Alumni, “El Fonógrafo”.
El Sr. Bazán, dio su presente con nuevos y
variados muñecos, Pinocho, un elefante, una jirafa, entre otros. Comparsa
presentó el Club Plaza Italia y murga, una muy buena, hecha por Plaza España,
las dos llenaban con su entusiasmo y algarabía.
Se realizó un Baile Infantil en sede de Juventud
Unida, por iniciativa de Viró Producciones, al cual concurrieron alrededor de
200 pequeños, los que recibieron montones de golosinas de manos de “Papá Noel”.
Un porcentaje de la recaudación se entregó al Hogar de Niños, quienes
disfrutaron del baile en forma gratuita. Otro se hizo en la sede itálica con la
animación de los muñecos del “toldinense”. Los ya tradicionales corsos de
antaño del último fin de semana comenzaron con tanta fuerza que se pudo
vaticinar el éxito.
Hubo carrozas y cuadros muy bien logrados e
interpretados por numerosos vecinos conocidos: “El casamiento de la Jenuaria”
-realizado por gente de Argentinos, con máscaras al estilo Molina Campos hechas
por los integrantes-, “Los Tanos de la Boca” -carroza en la que iban degustando
verdaderos tallarines al son de bellas canciones italianas-, “Las Mucamas”, un
hermoso grupo de vecinas: María Pirotta, Elida D´Elia, Mimí Platero, etc. Las
comparsas candomberas, por momentos hacían llegar su ritmo a un punto realmente
frenético.
Los premios de los corsos oficiales resultaron
compartidos, tanto en comparsas -Plaza España y Plaza Italia- como en carrozas
-Plaza Italia y Alumni-. Reina del Carnaval Veinticinqueño resultó electa
Silvia Fachetoni -representante de Plaza España- durante la velada en sede de
Alumni. Y sí, quedó bien justificado lo de “Ciudad del Carnaval”, más aún al
finalizar la fiesta provincial.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA
Para conservar dicho titulo, se luchó contra
miles de inconvenientes, sin embargo las soluciones aparecieron, intentando
así, no seguir retrocediendo en cantidad y calidad de las comparsas y carrozas.
En 1979, trabajaron juntos la Comisión de
Festejos Municipales y representantes de los diferentes clubes, basándose en un
nuevo reglamento, el cual incluía algunas ventajas: las aspirantes locales
desfilaron en automóviles 3 noches predeterminadas, completando una vuelta
completa del recorrido. No se permitió reformar ni arreglar ninguna carroza
luego de la primera velada. Se aumentó de manera importante la iluminación del
recorrido, ayudando a que las distintas entidades tuvieran menos gastos en sus
carrozas. Se prohibió el uso y la venta de nieve en cualquier lugar y momento.
En cuanto a los números: las murgas, debían
contar al menos con 20 integrantes incluidos los percusionistas, las comparsas,
40 pasistas y 4 percusionistas. La edad mínima para integrar cualquiera de las
dos era de 14 años. Los instrumentos requeridos por los distintos grupos fueron
adquiridos por la comisión. Cada persona disfrazada tuvo que tramitar el
correspondiente permiso policial. Comisario de Corso se nombró a Jorge Raposo;
el palco oficial estaba en la esquina de 9 y 27. En el edificio municipal se
instaló una Oficina de Prensa que visitaron varios periodistas foráneos, por
ejemplo de Radio Mitre y Diario La Razón, en el cual salió publicada una página
completa sobre los corsos de 25, días previos a su inicio. Las fiestas 79
fueron auspiciadas por la firma “La Elvira”.
Se cobró entrada a los mismos en 3 de las 10
jornadas carnestolendas -una de corso oficial, una de antaño y la noche de la
Fiesta Provincial-, echo que no influyó en la cantidad de asistentes. El
recorrido del desfile se extendió nuevamente hasta calle 31, estipulando la
entrada de los diferentes cuadros por las esquinas de 10 y 27 y la de 9 y 31,
únicamente. Para la recaudación de fondos destinados a los premios, la comisión
ideó la venta de una rifa.
Llegó el momento esperado, y fue a todo lujo. La
velada inicial abrió el desfile la Banda Infantil Municipal de 25 de Mayo,
haciendo su debut, en dicha oportunidad estuvo presente el Coronel Mario
Guillace -Supervisor Mayor de todas las Bandas del Ejercito Argentino-, el
pueblo entero ovaciono emocionado la actuación del grupo.
Fue al escucharse la bomba indicando la hora 0
de los Carnavales 79, cuando los diferentes cuadros empezaron al recorrido:
“Travolta y su Ballet”-30 “señoritas” divertidas y coquetas, entre ellas: Pucho
Sciorra, Spagnoletti, Piqui Viganó…-; ADAF y Peña El Fortín presentaron unos
grandes y hermosos monigotes de personajes infantiles; Peña Mi Rincón y Ballet
Folklórico 25 de Mayo, una hermosa comparsa infantil: “Las Golosinas”. Se
pudieron ver muchos motivos originales, máscaras sueltas, carrozas y comparsas.
La segunda noche no bajó en nada de categoría ni glamour. A las 22,00 en punto,
La Guardia de 25 de Mayo inició su marcha por el recorrido del corso, el paso
acompasado y la gracia de “Las Fortineras”, sumergió al público en un
espectáculo “para ver”. Se las premió con un aplauso y ovación que expresaron
todo. Detrás desfiló nuevamente la Banda -lo realizaría la 1ª noche solamente,
pero la emoción sentida, hizo que estuvieran presentes en todas-. Terminado el
1º fin de semana, se alambró todo el recorrido para facilitar el paso de los
motivos, aún ante la protesta de vecinos y comerciantes. También se sacaron
árboles sobre la vereda de 27 entre 9 y 10, para la instalación definitiva del
palco.
Las veladas posteriores comenzaron media hora
antes, para agilizar dicho desfile. La 3ª jornada desfilaron las aspirantes al
trono local. ADAF y Peña El Fortín auspiciaron un Baile infantil en la sede de
P. Italia, animado por sus monigotes.
Las carrozas, grupos y comparsas fueron de
destacada calidad y originalidad. “Un Paseo por el Cielo” -comparsa de Alumni-
dejó ver al sol, la luna y las estrellas bailando en las calles, consiguiendo
así el 1º puesto; su carroza representó un hermoso “Sueño Infantil”, en el cual
un grupo de pequeños se dormitaban al oír un cuento y a sus espaldas, estaba la
inmensa bruja cocinando a un perro dentro de una gran olla, de la que salía
humo. Plaza Italia también se jugó con carroza y comparsa. En el rubro de
carrozas el 1º lugar fue ocupado por Argentinos, que retornó a “todo o nada”.
El vecino Villejas armó, y muy bien, una comparsa: “Celeste y Blanco”.
Los Corsos de Antaño, atrajeron mucho público,
se volvió al juego con nieve y la alegría fue la dueña de las calles.
Innumerable cantidad de disfrazados aportaron entusiasmo, sorprendió la carroza
“El Circo Show” -Spagnoletti era el lanza-fuego, acompañado por artistas muy
buenos y hasta el enano de circo-; “La Fiesta de la Vendimia” -carroza de los
Panesse- tenia instalado un molino a escala del que no paraba de salir vino con
el que convidaban a los espectadores, además llevaba a la “reina” -don Ismael
Barbá-. Muchos quisieron divertirse, la gente del Auto Club, la barra de
Argentinos dirigidos por su presidente, más de 30 números que divertían y se
divertían. En ambos corsos fue destacable la iluminación, no así el sonido
general, que impedía oír la música propia de cada cuadro. Tampoco gustó que las
comparsas fueran acompañadas solo con percusión. Durante el Baile Oficial en
sede de Sportivo se coronó Reina del Carnaval Veinticinqueño Patricia Robledo
-por Peña El Malambo-. Los turistas sentían como su casa el Parque de la Laguna
en el cual se instalaron numerosas carpas. Y luego de la esperada Fiesta
Provincial, esto quedará para el recuerdo, y la consigna será pensar en la
próxima…
UNA NUEVA DÉCADA ¿PUEDE
MATAR AL CARNAVAL?
Al comenzar los años 80, los carnavales contaron
con la presencia de importantísima cantidad de público, no así de motivos
presentados de las distintas categorías. 25 de Mayo no se lucía como en los
espléndidos años 70, que marcaron a fuego la “Ciudad del Carnaval”. Los números
tenían menos integrantes y el vestuario menor calidad. Se produce un descenso
notable en lo que respecta a la “curvatura” de diversión.
El año 1980 se presentó muy complicado, más que
nada en la parte económica para la realización de los corsos. Tratando de
levantar un poco los ánimos del pueblo en general, la Comisión brindó nuevas
pautas para la creación de los diferentes cuadros. En comparsas debía haber 52
integrantes, contando entre ellos 4 pasistas y 8 percusionistas, las murgas se
podían formar con un mínimo de 30 integrantes, los grupos con motivos
originales, mínimo 10. Para la recaudación de fondos, se puso a la venta una
rifa y un bono contribución, el cual servia como entrada durante una noche. En
todos los bailes se agregó un plus a las entradas que era para la comisión, la
cual a su vez, organizó dos Bailes Pre-Carnaval para recaudar fondos. No fue
necesaria la colocación de los alambrados y el recorrido volvió a acortarse
hasta calle 30.
Pasó a cobrarse entradas en todas las noches de
corso oficial, siendo el 50% para entidades de bien público. El hecho de que
Lunes y Martes ya no fueran feriados, influyó mucho en la cantidad de público.
Los grandes ausentes del año fueron el Club
Argentinos y la Banda Infantil. Coca Cola, auspició los corsos y la Fiesta
Provincial.
La jornada inicial empezó con mucho retraso y
demasiados baches entre los números. La segunda noche, tratando de elevar el
nivel abrieron el recorrido “Las Fortineras”, presentando nuevos pasos, vestuario,
realmente muy bien. Las siguieron las Reinas de Sportivo y Plaza Italia.
Las carrozas presentadas resultaron de gran
calidad y de mucho esfuerzo humano para su realización. El Globito, con “La
Flor del Camalote”, demostró su trabajo y empeño puesto, más que nada por la
falta de experiencia. Se adjudicó el 3º puesto y una mención especial al
mérito; Plaza España: “La Metamorfosis de la Mariposa”-el gesto de los dos
gusanos, “él y ella”, atrapó a los espectadores-; Alumni: versión árabe de “El
Sultán del vino” y Plaza Italia: “Festival de los Conejos” -muñecos en
distintas posiciones asando al spiedo una zanahoria-.
Plaza Italia y El Globito presentaron murgas,
este último se lució llevando como director de la misma a don Ismael Barbá y
entre sus integrantes a Spagnoletti. En comparsas, “Travolta” encabezaba a la
de Alumni: “Carnaval Copacabana 1980”, la que contó con muy buenos bastoneros y
el acompañamiento en vivo del grupo “Ave Luz” -se adjudicó el 1º premio-. El
Sr. Villegas otra vez dijo presente con una comparsa. El grupo de ADAF presentó
nuevos muñecotes, atracción de grandes y chicos. Además se vieron varios
motivos sueltos.
Los corsos de antaño mostraron mucho público en
todo el recorrido jugando holgadamente con nieve. Se vieron creaciones de
singular valor artístico, como reproducciones de los almanaques “Alpargatas”
con creaciones de Molina Campos, amén de otras que simplemente brindaban su
humor mediante la originalidad. Villegas también hizo comparsa, Sportivo:
“Scola que Gambas!”, Argentinos la carroza “Niños en el Parque” y muchos más.
El Corso de Antaño salvó la trascendencia del Carnaval en 25 de Mayo y se
convirtió en un gran espectáculo.
Resultó el más flojo de los carnavales hasta el
momento en la historia moderna, se salvó el prestigio gracias a la tradición.
El turista aceptó el nivel ofrecido, pero el público local, según sus propias
palabras, no. Lo positivo se basó en la cantidad de entradas vendidas durante
todas las noches. Los bailes tuvieron su éxito, tanto los tradicionales como
las tanguerías y confiterías bailables -Miau y Yakuma-. En sede de Alumni tuvo
lugar el Baile de Coronación de la Reina Local: Silvia N. Burgos, representante
de Sportivo.
TOMAR CONCIENCIA CUESTA…
El Carnaval, es lo que más trascendencia le ha
dado a la ciudad en el ámbito nacional. A comienzos de los ´80, a pesar de los
avatares económicos que sacudían al país, subsistió, aunque no con el brillo de
años atrás. La comunidad toda, seguramente, debió, sentirse responsable de los
“galardones sociales” logrados, imposible buscar culpables ni salvadores, la
realidad fue y será que es mucho más difícil mantener algo que crearlo. La
artesanía carrocera local, siempre se distinguió entre muchas otras ciudades.
No todos entendían que “Carnaval” no solo significaba -y significa- el dinero
de los premios, sino, una empresa en la que debiera estar todo veinticinqueño,
ya que al concretarse ganan todos, hoteles, comercios, instituciones.
Aunque se perdió mucho del lujo a causa de los
grandes costos que significaba todo emprendimiento, el Carnaval 1981 se vio
renacer.
Era principios de febrero cuando comienzan a
organizarse los miembros de la comisión, lo que llevó a arriesgar mucho en muy
poco tiempo. Las definiciones se tomaron con rapidez y se trabajó sin horarios.
Principalmente, fueron realizadas las
respectivas invitaciones a todos los partidos de la provincia de Bs. As. para
la Fiesta y Elección de la Reina Provincial del Carnaval 1981-tarea a cargo de
la Dirección de Cultura Municipal-.
Las bocas para el cobro de entradas estuvieron
atendidas por representantes de diversas cooperadoras escolares.
El cambio más importante se dio al trasladar el
recorrido hacia otro sector de la ciudad, según lo explicado, a consecuencia de
la poca predisposición de colaborar de algunos comerciantes, además de brindar
así, la posibilidad a clubes y entidades de bien público de colocar parrillas
y/o cantinas a lo largo del mismo. Esto acarreo mayores gastos en ornamentación
y alumbrado. El corso se realizó por calles 9 y 10, desde 30 a 34, ubicando el
palco oficial en esquina de 9 y 30 y frente a éste, gradas con capacidad para
unas 500 personas. Con la anticipación debida, la entidad decana había
anunciado su no-participación debido a la falta de dinero y personal para
preparar algún motivo, ya que los premios estipulados no cubrían los gastos
para encauzar algo mínimo. Tampoco estuvo presente Plaza España.
Luchando contra viento y marea, se pudo, la
primer noche de corso, aunque no mostró majestuosidad, se colmó de público
jugando animadamente con espuma, las gradas se llenaron, entre los motivos se
observaron más carrozas y comparsas -aunque menos imponentes- lo importante fue
que no hubo baches durante el desfile, al cual lo inició la Banda Infantil.
Estuvo presente la ya conocida comparsa Catinga y sus “bellas mujeres” con
nuevo vestuario y música contagiosa. Otro foráneo infaltable, don Juan Bazán
llegó con “El Circo de Dumbo” cargada de muñecos con movimientos mecánicos
caracterizando a distintos animales.
Los veinticinqueños demostraron su esfuerzo para
que “carnaval” siga siendo carnaval. ADAF presentó una comparsa formando con
sus muñecotes, un equipo de fútbol completo, además de una carroza con muñecos,
globos y alegría. “Paseo en el Caribe”, fue el nombre de la carroza itálica, la
escuelita de fútbol de dicho club formó una comparsa: 55 pequeños, una reina y
sus princesas, con muchas ganas de divertirse. Igual entusiasmo se vio en “Un
Mundo de Payasos”, carroza que llevaba a un montón de niños realizada por la
Guardería del Club Atlético Argentinos, ganadora del primer premio.
Complementando esta inauguración, se presentó la
comparsa Samba- Samba -oriunda de Lincoln- mostrando un maravilloso despliegue
de ritmo y vestimenta.
El aporte de alegría y diversión, música fuerte
y ruidosa, lo pusieron las murgas, El Globito armó una muy buena, con 25
integrantes y 5 percusionistas, adjudicándose el primer puesto. Otra la
realizaron vecinos de la 3 y 26, juntando alrededor de 40 personas.
Spagnoletti, numero seguro en los corsos, mostró
en su comparsa el trabajo “a pulmón” hecho por las 45 personas que la
integraban, acompañados por un grupo de músicos de la ciudad de Azul.
El Globito trabajó, y mucho, armó la comparsa
“Fantasía Tropical” con gran ritmo y disciplina, además, una carroza que
mostraba a un gran pulpo, caballitos de mar, delfines y una almeja de la cual
salía su postulante al trono local. Otra de las buenas cosas vistas: “Noche de
Estrellas”, comparsa encabezada por el conocido Aníbal “Travolta” Leguizamón,
seguido por una patinadora, bailarines, acompañados por el grupo “Ave Luz”
interpretando la música en vivo, excelente trabajo de Alumni, digno ganador del
primer premio obtenido.
Los muñecos del Sr. Ferreyros, entremezclados
con las máscaras y motivos sueltos, brindaron todo de sí. Terminado el 1º fin
de semana, gran desafío para la comisión, se debieron realizar varios ajustes y
para las noches venideras se contrataron números a otras ciudades.
Visitó 25 la Scola do Samba “Brasil Pandeiro
Show”, la ya esperada y alegre “Catinga” y “Pirá Yirá”, comparsa llegada desde
Rojas, la que sirvió como marco al desfile de las princesas locales.
El broche final a las fiestas se dio con los
Corsos de Antaño, cargados de alegría, energía y ganas de divertirse. El
desfile fue abierto por la banda Infantil, la concurrencia de público era
relativamente alta, se vio a casi todo el mundo corriendo y jugando con espuma
y globos -participantes y espectadores-; entre los números se observó una
comparsa de Gitanos -El Globito-; “Chamamé”; “El Boliche de la Taba, Truco,
Bocha y Generala” – los que convidaban con maníes y aceitunas a todo el mundo;
la escuelita de fútbol de Plaza Italia representó “Una noche en un Saloon de
Las Vegas”, formada por muchos y divertidos “Cow- Boys”.
Las noches bailables no fallaron, cada club
continuo con sus bailes tradicionales y los oficiales.
Amen de los esfuerzos, el Carnaval de Antaño
tampoco consiguió el nivel deseado. Las carnestolendas culminaron con el Baile
de Elección y Coronación de la Reina local, en sede de Alumni, recayendo el
título en la Srta. Adriana Rivolta -representante de Araujo-.
Estos corsos no llegaron a cubrir las
expectativas de organizadores ni vecinos. Pero, para el visitante que no los
vivió antes, sí, la fiesta fue imponente, tanto por la cantidad de público, de
carrozas, el ritmo de las comparsas y los motivos contratados que dieron un
matiz positivo. Pasada la fiesta provincial, los esfuerzos se redoblaron para
encarar el año próximo.
CUANDO LAS SOLUCIONES
ESTÁN SEGUIDAS DE PROBLEMAS
La contratación de los números foráneos en 1981
consiguió que el déficit se adueñara de la comisión, la cual en Enero del 82,
no terminaba de saldar las deudas. El hecho de casi “restringir” la presencia
de los creadores del “carnaval moderno”, los clubes, el año anterior fue un
grave error.
Al comenzar 1982, la Cámara de Comercio,
Industria y Producción de 25 de Mayo hace pública una carta expresándose en
contra de la realización de los carnavales debido a la cruenta situación
económica nacional, aunque sí defendía las puertas que se abrían al miniturismo
gracias a los mismos.
El Carnaval ´82 comenzó a gestarse, si
fracasaba, “… cientos de personas que se movilizan por sus entidades, habrán
conocido la tristeza de no ser comprendidos, pero seguirán luchando por su
agrupación, club… Mientras, los negativos de siempre seguirán criticando.”
El cobro de las entradas continuaba en manos de
los colegios. La Comisión organizó en Plaza Italia y Alumni, bailes precarnaval
para la recaudación de fondos, igualmente se continuó con la rifa anual de los
corsos.
Se realizaron cambios importantes: el recorrido
retornó al trazado original, calles 9, 10, 27 y 30. Desde este año la
explotación de cantinas y parrillas se la adjudicó la comisión. Para los
premios se pasó a dividir a las comparsas en dos categorías: locales y
foráneas. No fue grato la negativa del Club Plaza Italia de no participar,
siendo una de las instituciones iniciadoras, además de haber conseguido varios
logros gracias al carnaval.
A todo o nada abrió la edición 1982, una de las
noches actuó la Banda Infantil Municipal. En carrozas hubo para todos los
gustos: ADAF creó una granja con grandes zapallos, una canasta llena de
zanahorias, un espantapájaros y un montón de pequeños trabajando con rastrillo,
azada y regadera. El grupo “Ave Luz” se “largó” solito, y presentó “Fantasía”,
la que mostraba un faro, ellos tocando en vivo y de fondo un inmenso sol. No
podía fallar El Globito, y armó “Disneylandia” en la que viajaba el Pato Donald
con toda su familia -todos muñecotes inmensos-; “El Gran Circo Miguelito, de
Norteamérica a 25 de Mayo” con todos elementos e integrantes que componen un
circo fue realizada por la gente de SHELL de 25, quienes, ante el esfuerzo
recibieron el primer premio.
Peña Mi Rincón y Ballet Folklórico 25 de Mayo se
unieron en “Ritmo, Alegría y Cerveza”, muy buena comparsa, en tanto El Globito
se llevó el primer lugar con “Fiesta Carioca”. Un grupo de caras conocidas se
observó en la comparsa “El Jardín de las Caléndulas”.
Entre las forasteras estuvo Samba- Samba
-Lincoln- con su fastuosidad y buen gusto; “Estrella Carioca” y “Macumba
Toldera” -ganadoras en Los Toldos- y “Estrellado´82” de Capital Federal, que no
agrado mucho. No fallaron las murgas, que hacen la alegría de los corsos, una
de El Globito -con mucho ritmo de tambores-, otra de la Subcomisión de Fútbol
de Plaza España, también “Los Cebollitas” -Escuela de Fútbol de Plaza Italia- y
“Las nenas del Cañón” de Los Muchachos del Carnaval.
ADAF y la Agrupación de Arte Nativo hicieron un
montón de muñecotes: Mickey, El Pájaro Loco, etc. que con los motivos sueltos y
conjuntos entretuvieron a chicos y grandes. Los bailes cobijaron a todos
aquellos amantes de los distintos ritmos y las trasnochadas.
CORSOS INFANTILES
Fue el complemento justo para los corsos, dio
los mejores resultados. El Corso Infantil, seguido por un baile para los
pequeños, fue un éxito inesperado, se vieron cientos de niños disfrazados
brindando su espontaneidad y dulzura, acompañados por miles de espectadores que
lo pasaron de maravillas. El Baile no fue para menos.
Los Corsos de Antaño conjugaron alegría y
entusiasmo. No faltó nadie, clubes, barrios, se vieron carrozas, carros,
comparsas… Volvieron la serpentina y el papel picado. Entre los motivos: “La
murga del 40”, “Los linyeras del 2000”, “Sulky TC 82”, una carroza en la que se
ordeñaban vacas en un corral -idea de los decanos- y muchos más que lograron la
continuidad del desfile. Durante el baile de Elección de la Reina local del
Carnaval resultó electa Hebe N. Maffeo -Argentinos-. El público aportó mucho en
cada evento, este año el esfuerzo dio más frutos, aunque lejano a otras
oportunidades. Lo importante, todos aquellos que trabajaron con optimismo y
sacrificio lograron “hacer el corso” que se vio coronado con broche de oro al
terminar la Fiesta Provincial.
En el transcurso del ´82 y a principios de 1983,
los carnavales pendían de hilos muy finos, estaba el problema económico y los
integrantes de la comisión presentaron la renuncia a su presidente. Las
instituciones no contaban con un solo peso para aportar al carnaval, imposible
realizar corsos sin plata, sin premios y sin cobrar entradas.
VOLVER A EMPEZAR
Con todo en contra, lo blanco negro y lo negro
blanco, el carnaval ´83 se realizó. ¿Cómo?, gracias a las instituciones. Plaza
España, Plaza Italia y Alumni formaron una nueva comisión -aceptada a través de
un decreto por las autoridades comunales- que recibió la autorización para
organizar las fiestas. De ahí en más, a trabajar. La comuna se encargó de los
gastos en iluminación, ornamentación, etc.; los responsables de confiterías y
salones de baile realizaron un aporte voluntario para la organización; el cobro
de las entradas quedó a cargo de la comisión, con ayuda de los Bomberos
Voluntarios. Nueva variante del recorrido: se inició en 10 y 27, por 27 hasta 9
y por 9 hasta 31, retornando por la misma calle hasta el punto de partida. Se
cambio el orden de los corsos, el primer fin de semana se realizó el “Carnaval
de Antaño” y al siguiente comenzaron los oficiales, siendo 4 noches seguidas y
otro fin de semana.
Al igual que otros años, los de antaño se
cargaron de alegría, concurrió gran cantidad de público, aunque debido al
acorte de tiempos, los motivos presentados fueron menos -en 25 de Mayo hubo
siempre quienes no piensan tanto y solo lo preparan-. No por ello disminuyó el
entusiasmo de todos los presentes. Igualmente no faltaron los asados y
choriceadas que caracterizan a éstos números, entre los que se vieron: un
rancho muy bien logrado, un vehículo antiguo ocupado por doctores y empleadas
del centro asistencial, “Los amigos de don Pancho” -todo el grupo Manfredi, que
después del casamiento del año anterior, llegó el bebe y ahora… a cuidarlo-
La Comisión organizadora junto a la Dirección de
Cultura Municipal realizaron un corso infantil y baile frente al Palacio
Municipal, evento que puso una gran cuota de ternura y superó las expectativas
iniciales, ya que contó con muchos participantes y espectadores. Durante las
noches de corsos oficiales, la gente se volcó masivamente. La apertura inicial
estuvo a cargo de la Banda Infantil Municipal, gracias al trabajo de muchos
vecinos pudieron verse diversas carrozas y comparsas. Alumni, en carroza armó
algo totalmente original, en la misma viajaban jóvenes con grandes mascarones
caracterizando a conocidas personas de la entidad; El Globito, recreó un show
de la cantante italiana Rafaela Carra; dicho club organizó una muy buena
comparsa que le dio el primer lugar, “Ritmo y Color”; Plaza España, trasladó a
su carroza a toda una selva con sus animales, “Monolandia 83”, a su vez, formó
una comparsa al estilo “Las Fortineras”.
Los itálicos también ofrecieron carroza y
comparsa, en la primera categoría, “La Gallina y sus pollitos” -trabajo muy
bien hecho en los grandes muñecos, con movimientos en la cola y cabeza- que le
hizo ganar el primer premio. La escuela de fútbol de dicho club junto al Ballet
Folklórico 25 de Mayo, fueron quienes armaron la comparsa “Tropicana”.
El Globito, gente de trabajo duro y sin
descanso, presentó la murga encargada de colmar de bullicio y entusiasmo a
todos los presentes.
Motivos sueltos hubo muchos, así como máscaras y
conjuntos: “Los Canillitas”, “Volvieron los Gorilas”, “Los Picapiedras”, etc.
Todos los bailes alcanzaron éxito. A pesar de no haber sido los carnavales más
lujosos, 25 de Mayo no cortó la tradición y todo el pueblo apuntaló. La
elección y coronación de la reina veinticinqueña se realizó durante una velada
en el club Plaza Italia, obteniendo el titulo, Alejandra A. López,
representante de Sportivo.
Al culminar las fiestas, incluida la provincial,
estaba estipulado desde el principio que de existir superávit entre todo lo
recaudado a nombre de la comisión, se repartiría en forma igualitaria entre los
tres clubes organizadores. ¿Lo hubo?…
Los mismos, después de todo el esfuerzo
realizado obtuvieron el mejor premio: la satisfacción del deber cumplido.
Teniendo la experiencia de los años anteriores,
la Comisión Interclubes de 25 de Mayo renovó algunos de los puntos del
reglamento. Continuo vigente la rifa para recaudación de fondos.
Nuevamente se varía el recorrido, el cual
regresa a las calles 9, 10, 27 y 30, ingresando los motivos por 10 y 26 y 8 y
30, únicamente.
La Comisión se encargó de comercializar por su
cuenta toda la parte publicitaria que estuviera dentro de dichas cuadras. Queda
estipulado una menor cantidad de integrantes para cada categoría: comparsas, un
mínimo de 30 incluidos los músicos, permitiendo que la música sea grabada o en
vivo; para las murgas, el mínimo era de 15 personas.
Lo relevante e importante a tener en cuenta, era
que al cobrarse una entrada, estas fiestas pasaron a conformar un espectáculo,
por lo cual había que cuidar hasta el detalle más ínfimo.
Resultó una década difícil, pero el público,
local como foráneo tuvo una actitud consecuente a pesar de la decadencia de los
corsos, ya que conocían y sabían el “hacer” de los clubes.
Estos Carnavales de antaño resultaron más
alentadores, se pudo calcular un promedio de 16.000 personas durante el fin de
semana, pero tampoco llegaron a colmar todas las expectativas. Los grupos
fueron varios y muy divertidos, aunque no resultaron la cantidad ni de la
calidad esperada. Dieron el presente: “El grupo Manfredi y sus amigos”,
Margarita Arroyo y sus chicos tangueros, la gente de la parroquia presentó “Los
Pintores”, quienes obsequiaban frases muy lindas a todos los presentes, también
una carroza de la Cooperativa de Tamberos que convidaban con quesos a todo el
mundo, todo esto además de cantidad de números y máscaras sueltas.
El sonido general resultó bastante malo. La
gente terminó algo decepcionada, lo cual fue un mal “aperitivo” de los corsos
oficiales. Tienen lugar todos los bailes tradicionales más los oficiales.
Comenzados los corsos oficiales, el panorama no
varió mucho, sí se pudieron ver varias carrozas: “Un Brindis por la Paz” -El
Globito-; “El Show de Clemente” -Alumni-, “Mundo de Golosinas” -Plaza Italia-,
“Espinaca” -Sportivo- “La Diablada” -Argentinos, como acostumbró siempre, fue
un trabajo espectacular que ganó justificadamente el primer lugar- y Juventud
presentó un muy buen cuadro taurino. Plaza España, llamó a su carroza “Ronda de
Conejos” -mamá coneja y sus conejitos-. En cuanto a murgas, varias y
peligrosas: “Las chicas del 17”, llevaban muy buena percusión, entre sus integrantes:
Cachorro Marelli, el “Nene” Albo, Rubén Loureiro, y muchos más que llenaban de
rouge a todo el que podían agarrar. Otra la presentaron vecinos de 4 y 24, con
más de 30 personas y muy buena percusión.
Juventud formó una comparsa encabezada por Spagnoletti,
“Las Mariposas”; Plaza Italia, “Los Marineros”; ADAF “Timba- Timba”, un juego
de 40 cartas españolas, cada integrante representaba a una. Además se vieron
varios grupos y motivos sueltos. Las carrozas no fueron de las más notables,
pero bien. Hizo falta mayo iluminación. Poco a poco los corsos van recuperando
su prestigio.
El Corso Infantil se convirtió en un éxito
rotundo. Estuvo organizado por el Centro Educativo complementario Nº2 con el
auspicio de la Secretaría de Bienestar Social.
Las calles se vistieron de colorido y alegría
ante la presencia de los niños. Primero actúo la banda Infantil y luego se
procedió al desfile que constaba de 3 vueltas completas a la Plaza Mitre.
La elección se la Reina del Carnaval
veinticinqueño fue realizada en Alumni, siendo la elegida, Patricia N.
Gorosito-Sportivo-. A esperar la Fiesta Provincial y pensar en el próximo…
UNA LUZ AL FINAL DEL
CAMINO…
En la etapa preparatoria de las carnestolendas
´85, se observó una tendencia a crecer, a retornar o por lo menos acercarse, “a
los buenos tiempos”. Para lograrlo tuvo “todo” que ver la Asociación
Interclubes. Era imprescindible una previa recaudación de fondos -continuaba la
rifa anual y se hicieron bailes de pre-carnaval-. Vuelve a trabajarse fuerte en
la promoción nacional de éstas fiestas -se lleva material a la Exposición de
Bs. As., en la Casa de la Provincia, y a la exposición de Mar del Plata-.
Se trataron ciertas cuestiones en pos de
mejorar: dejando de lado por primera vez y definitiva, los lunes y martes de
carnaval, optando por 4 fines de semana seguidos. Cada club integrante de la
comisión, debió presentar por lo menos, un número: comparsa y/o carroza.
El recorrido no varió, utilizando la cuadra de
30 entre 9 y 10 para descanso de los grupos. Quedó estipulado la realización de
todos los bailes tradicionales de cada sede, más los oficiales.
En carrozas, los trabajos presentados mostraron
esfuerzo, ingenio y voluntad. “México lindo y querido!…” -cuadro recreado por
una inmensa águila, templos mexicanos y Mariachis-, una presentación de la
entidad decana, ganadores del primer puesto; “Deixa a Portela passar”, la
carroza, correspondiente a Plaza Italia, toda en sí, conformaba todo el cuerpo
de un águila, -Portela, una de las Scolas de Río, utilizó como símbolo en 1980
a esta ave-; El Globito realizó grandes muñecos con movimientos, acompañados
con flores, música y varios niños: “Los Pitufos”; Juventud Unida, armó un gran
“Juego de té”, tan bien hecho, que parecía de porcelana; Alumni se decidió por
el humor, “El Show de las Colitas Frescas” en la cual, Hugo Rosciano era la
figura principal -caracterizado por un gran muñeco con un micrófono en sus
manos- y delante de él, varias chicas bailando; los “cebras” expusieron una
escena bien de campo: el gaucho hamacándose en una reposera, mientras fumaba un
cigarrillo y observaba como su vaca era ordeñada mecánicamente; “El Gran
Carlitos”, en homenaje a Charles Chaplin, fue el motivo elegido por “los
dragones”, quienes recrearon su singular sombrero y originales zapatos, dentro
de los cuales iban bailarines. Se presentó un nuevo grupo en esta categoría,
“Amigos de Hugo Alem” -apoyaban al piloto de TC Roqueperense-, debutando con
“Gran Circo Fran Fran”, lleno de payasos, trapecista, cámara filmadora, un
enano y un mono enjaulado, obteniendo el 1º premio en Humorísticas.¿Y LAS
COMPARSAS?: La gente del “Viejo Nacional” presentó “Iberá”, comparsa compuesta
casi en su totalidad por el sexo femenino con muy lindos y “llamativos” trajes,
que bailaban al compás del órgano de Antonio González Salguero. Visitó 25,
“Sara Mama” -comparsa llegada desde Bolivar-, integrada en su gran mayoría por
pequeños que mostraron un buen trabajo de grupo. ADAF estuvo presente con
nuevos muñecotes amigos de los niños, además de componer junto con Miau, un
hermoso Ford A.
Se vieron varios motivos sueltos de gran
originalidad como el que resultara ganador: “El Patito Feo alimentado por
Cargill”.
Con el correr de los días, se logró ir teniendo
continuidad en el desfile, así como también fue aumentando la animación, las
ganas de divertirse y la predisposición al juego con espuma.
Las expectativas no se colmaron por completo,
era el momento de replantearse si continuar o no con la tradición de los corsos
carroceros, ya que resultó muy notable la falta de percusión y bullicio de las
comparsas.
La Banda Infantil, actuó el último día de los
corsos oficiales abriendo el desfile de las princesas locales. Terminado el
mismo se armó un “gran destape” y se jugó con agua en grande, algunos se fueron
enojados, otros no, y otros, fueron a “la comisaría”…
Los globazos volaban de Zercibal a la vereda de
enfrente y viceversa. Lo mismo se vivió en la esquina de 9 y 29.
EL MEJOR DE LOS ÚLTIMOS
TIEMPOS
Estos corsos de antaño vieron revivir al
carnaval, a los artistas y a los espectadores.
Conjuntos, carros, autos, máscaras sueltas,
fueron incontables. Para recordar algunos: la carroza de la Cooperativa de
Tamberos -no se cansaron de repartir hormas de queso entre el público-; una
carroza de Sportivo, “Los Payasos”, verdadero peligro, llevaban harina, agua,
espuma…; Juventud representó “El Casamiento de Motoneta”, estuvo presente
Toquila López y su comparsa, otra de Alumni, con “cada nenas” que daban miedo…;
“Las chicas del destape” correspondiente a Plaza España, “divinas”. Además hubo
un “auto loco” traído por Miau desde Pedernales, etc.; pero el grupo más
destacado y valorado fue “Volver a Vivir”, comparsa armada por jubilados y
pensionados de 25 de Mayo, un hermoso y verdadero ejemplo para todos. Otros,
destacados también pero no por su recato, “Taverna y los 40 ladrones de Alí
Madlum”, con machetes, cachiporras, harina, agua, ruda, rouge, no dejaron
“títere con cabeza”, entre los Alí: Cachorro Marelli, Madera Gastaldi, Pedrito
Paramio, Rubén Loureiro, etc.
Se compartió picardía, buen gusto, ingenio,
alegría, lo único que se pudo hacer, fue vivirlo.
El corso infantil consistió en el mejor final
para estas fiestas, -organizado por el C.E.C.- se anotaron más de 172 grupos y
conjuntos, alrededor de unos 800 niños, -la Comisión Interclubes hizo un aporte
para los premios-, que antes del desfile fueron homenajeados con la actuación
de la Banda Infantil. El desfile fue abierto por la carroza “Cumpleaños en el
Bosque”, realizada por el C.E.C. Los pequeños pudieron jugar, divertirse y bailar
en su propio baile en sede del Club Alumni.
En el mismo lugar se efectuó el baile de
elección y coronación de la Reina local, título obtenido por Analía Lujan
Evangelisti -El Globito-.
Esta vez se pudo festejar de verdad, ya que
éstos carnavales sí fueron superiores. La mirada ya puesta en la Fiesta
Provincial, para que ninguna nube pudiera empañarla. Empapados por el
entusiasmo se comenzó a imaginar el próximo año, que obviamente, habiendo
encontrado el camino, se debía seguir subiendo…
CARNESTOLENDAS DECLARADAS
DE “INTERÉS PROVINCIAL”
Fechado el 15 de Enero de 1986, con la firma del
Gobernador de la Provincia, Dr. A. Armendariz, salió el decreto 181, que entre
otros puntos expresaba: “…dada la magnitud que alcanza dicha festividad en 25
de Mayo, las autoridades bonaerenses lo han tenido en cuenta y han procedido a
declarar la misma de Interés Provincial…”. Ésta, fue la 2ª oportunidad que 25
de mayo alcanza dicha distinción, anteriormente se dio entre 1973 y 1976. El
haberlo logrado significó ir a “todo o nada” en los corsos venideros. La
Comisión Interclubes apostó a la organización y promoción, mediante el Sr. C.
Muniagorri -sus gestiones y aportes año tras año, “son” invalorables- se
consiguió publicidad en las Radios Rivadavia, El Mundo y Mitre. Dentro de las
mejoras, se colocó nueva y más cantidad de iluminación al recorrido. El empeño
y esmero puesto por Instituciones, particulares y todo aquel que deseó sumarse,
valió la pena. También se contrataron números y comparsas foráneas para
complementar.
En la presentación de las carrozas se observó
mejor categoría: “La Plaza de mi Pueblo” ideada por gente de Sportivo quedo muy
bella; Juventud realizó “Fantasía”; el Ballet Folklórico 25 de Mayo “Mundo
Marino”; “Los Dragoncitos se Divierten”, Plaza España; “La Diosa Kali” fue un
trabajo del Club El Globito -resultó monumental el muñeco de la diosa, tanto en
figura como en estética- obtuvo el primer premio compartido con “Fantasía en el
Bosque”, carroza itálica. La familia Acevedo, indudables fanáticos de su pueblo
y el carnaval, armó “Los Ídolos de 1985” -en la que se habían caracterizado
entre otros, Parisi, Porta, Maradona, etc.- y al no conseguir transporte para
tirar la carroza, lo hicieron a mano por todo el recorrido del corso,
obteniendo un muy merecido premio estímulo.
“Hawai”, fue el motivo elegido por la comparsa
de Alumni; los “Decanos”, “Fantasía 86” y Plaza España, ganó el primer lugar
con “Macumba Dragonera”, siendo la comparsa más numerosa y colorida, también se
presentó “Mambo-Mambo”, creada por Spagnoletti.
Alumni armó la tradicional batucada, en la cual
sonaron muchos redoblantes y bochinche.
Muñecos se vieron para todos los gustos y
edades, realizados por diversas personas, por ejemplo, vecinos del Barrio San
Alberto; N. Ferreyrós formó “La Familia del Pato Donald” -compuesta por 10
muñecos-; H. Domínguez y P. Mancilla realizaron un muy lindo dúo; la gente de
ADAF y el CEC hicieron 8 muñecotes más, éstos, unidos a las máscaras y motivos
sueltos, lograron contagiar entusiasmo. El que se vio mejorado con la presencia
de los foráneos: “El Auto Loco” -Gral. Alvear- y una batucada que llegó desde
Moquehua.
Lo más imponente: “Yirá Parí”, comparsa oriunda
de la ciudad de Rojas, integrada por alrededor de 80 personas.
La concurrencia de público resultó masiva y se
jugó con espuma hasta el cansancio, demostrando verdadero ánimo festivo.
“CORSO INFANTIL”, EVENTO
IMPRESCINDIBLE DENTRO DE LOS CARNAVALES
No necesitó reglamentarse, pero era algo seguro,
-siempre a cargo del CEC-, en esta oportunidad se anotaron 97 números, cifra
extraordinaria que reunió a miles de niños y adolescentes, y a toda una
multitud de espectadores dispuestos a disfrutar del momento. Durante la jornada
final de los corsos oficiales, desfilaron las postulantes al reinado local, al
cuál ocupó horas más tarde en sede de Alumni, Verónica Musse, representante
“cebra”.
Y llegó el tan esperado Carnaval de Antaño, por
el que desfilaron decenas de carros adornados, indicadas de diferentes
regiones: “Los Indios Pampa”, “Los Indios Watusi” -Club Argentinos-. También
estuvieron “Los Japoneses por la Argentina”; la “Diligencia 25 de Mayo-
Bolívar”, con sus guardias armados, y muchos más. Inesperada pero bienvenida,
resultó la visita de “Noche de Brujas”, comparsa de San Enrique.
Se vivió con mucha alegría, el pueblo se
aglomeraba por todos lados mirando o jugando.
Una edición enriquecedora para los ánimos
veinticinqueños que se mostraron esperanzados como hacía mucho no se veía.
Gracias a eso, el puñado de vecinos que nunca bajó los brazos, absorbió fuerzas
extras para encarar la próxima edición.
La comisión se formó con tres personas de cada
entidad agrupada: Alumni, Sportivo, Plaza Italia, Plaza España, Juventud Unida
y El Globito; secretario rentado: Hugo Rosciano.
En 1987 llamó la atención el clima, a causa del
frío que se instalaba por las noches.
La jornada inicial desfiló la comparsa “Yirá
Parí”, con gran vestuario, prolijidad, colorido y realce, pero se pudo observar
menos cantidad de integrantes, los que a su vez no mostraron muchas ganas de bailar.
CARROZAS: MAYOR CANTIDAD,
MENOR CALIDAD
Hubo varias carrozas: “El Descubrimiento” -una
carabela en movimiento, llevando a Colón, nativos, un cura, etc.- ideada por la
gente de Sportivo; “Fantasía Carioca”, ocupada por un inmenso muñeco candombero
con una gran pandereta en movimiento, creada por Plaza Italia; “Fantasía
Cubana”, de los “aurinegros”, con dos muñecos gigantes, palmeras, canasta con
frutos y el detalle de una flor blanca gigantesca acompañada por buena
iluminación, música y bailarines, obtuvo, objetivamente el primer lugar. Alumni
recreó “Paseo en Góndola”, belleza, ritmo de baile suave acompañando a las
jovencitas, una sutil y linda idea. El Globito realizó un trabajo artesanal
brillante: “Carnaval Papúa”, mostrando la historia de una tribu africana; “El
Carnaval del 30” ideada por Juventud, atrajo los mejores recuerdos y Plaza
España con muñecos caracterizando a diversos animales, presentó: “El Zoo Jazz
Band”.
En mini-carrozas, el Ballet Folklórico 25 de
Mayo presentó, “Las Mariposas” y las familias Acevedo- Gómez: “La Fiesta
Ratonera en la Villa”. Estuvieron las murgas, que siempre con la bullanguera y
alegre marcha hicieron su aporte; El Globito juntó a todos los “lanzafuego”;
también “Las Chicas de San Vicente” -un poquito musculosas- y los amigos de la
7 y 20. Muñecotes, motivos sueltos y máscaras entretuvieron al público menudo.
Visitas: “El Auto Loco”, con muchas y buenas
mejoras, las comparsas “Estrella Carioca” de Los Toldos; “Los Reyes del Cruce”,
a las cuales se sumó “Las Estrellas del Trópico”, de Spagnoletti.
La mejora del clima acompaño a mejorar las
noches de corso en cuanto a la cantidad de público y con mejores ánimos.
3ª vez consecutiva que el CEC se encargó del
corso infantil, al cual se le extendió el recorrido hasta calle 29. Más de 100
números anotados. La Banda Juvenil ofreció un mini recital, previo al desfile
de los niños. Hadas, crotos, toreros, una tribu completa y la “Guardia
Infantil” al ritmo de la batucada de Villegas, coronó toda la cantidad de
motivos vistos.
El público desbordó, resultado: maravilloso.
Como cada año, las noches dieron vida a los
bailes en las distintas sedes, además de colmar las confiterías bailables.
El cierre de los corsos oficiales estuvo
encabezado por el desfile de las aspirantes locales, de las cuales obtuvo el
titulo, Roxana Gamarra, representante de Plaza Italia.
Lo mejor queda para el final, en los corsos de
antaño 1987 se vieron carrozas y comparsas llenas de esplendor. No faltaron
caras conocidas: el grupo Manfredi, gente “dragonera” que llevaba una pileta
llena de agua y globos…, un barco inmenso del que bombardeaban con harina y
agua -hasta que los calmó la policía-, la comparsa de Villegas desfiló al ritmo
de tachos y tapas de ollas. La espontaneidad aseguraba el éxito.
Buenos alicientes para las entidades
organizadoras, entre las que no estuvieron, Sportivo -no organizó ni
participó-, ni Plaza Italia, que sí presento carroza, al comenzar las tareas
hacia el año próximo.
Año tras año, son los mismos pioneros los que
siguen firmes en éstas fiestas que, con altibajos, dice presente
Los carnavales 88, lograron mantener el nivel
del año anterior y en algunas cosas, superarlo.
“Stola do Samba Show”, comparsa local del Sr.
Villegas realizó una vuelta al recorrido en todas las noches de corso oficial y
la Fiesta Provincial sin cobrar por su actuación, donando dicha remuneración.
“La Pantera en el Trapecio” -el popular
personaje- fue el motivo elegido por Plaza Italia para su carroza. El Globito
representó los carnavales a través de los más conocidos instrumentos -matraca,
antifaz, etc.-, el romanticismo se adueñó de los “xeneizes”, armó la carroza
con 2 cisnes una fuente, pérgola, flores, farolas y música suave acompañando a
la joven bailarina. Alumni, junto al Colegio San Xabier, trasladaron una
“Fantasía Holandesa”; Plaza España conquistó con el humor, “Las Gatitas y los
Ratones de Porcel”; Argentinos aceptó el desafío, reeditó “Los Dragones”, igual
motivo que ganó en el 74 el 1º premio, pero con la carrocería totalmente nueva
y los inmensos dragones largando fuego. ¿Dudas?, fue la ganadora del 1º premio.
Desfiló una mini-carroza con todos los juegos
infantiles y llena de niños, “Fantasía en el Parque”.
Se presentaron muchos muñecos: “Plaza España
Campeón”, todo el equipo armado por el Sr. Gómez; Anteojito y su “clan” de N.
Ferreirós; entre otros. Una noche se vivió la actuación de “Caru Curá”,
comparsa de prestigio nacional, oriunda de Esquina, Corrientes, contando con
140 integrantes. Valió la pena tener que trasnochar un día de semana.
A los dos días, la algarabía de los Carnavales
de Antaño, en los que se vieron más de 90 números. Casi todo realizado con
espontaneidad por agrupaciones barriales: “Ignorancio el farolero”, “Los
Siameses”, Canal 3 y su gente, “Solteronas pero con apuro”, “Expreso el
demorado” -bañó a todos en harina y nieve-; “Los Gitanos” del CEC Nº2
adivinaban la suerte a cuanto conocido se cruzara.
El corso infantil superó los 120 inscriptos, lo
que significó un desfile con más de 300 niños, que tuvieron su baile en sede del
CEC.
Durante el baile de la elección local -en
Alumni- participaron jóvenes de todo el partido, coronándose, Mónica Fabiana
Ramos -El Globito-.
Luego de la Fiesta Provincial, el domingo, tuvo
lugar un Carnaval a Beneficio, todo lo recaudado se destinó a comprar el
mamógrafo del Hospital Unzué. Participaron motivos de ambos corsos, la “Stola
do Samba” y “Acuarela”, comparsa de Pedernales. Desde ahí, la única idea eran
los últimos carnavales de la década.
1989 se presentó difícil, el país pasaba por una
gran crisis energética, se realizaban cortes programados del suministro todos
los días.
CÓMO HACER LOS CARNAVALES
SIN LUZ
La Comisión estableció nuevo reglamento y
decisiones para utilizar la menor cantidad de energía eléctrica.
En cuanto a los bailes, se realizaron solo los
oficiales y de a uno por noche. El recorrido se acortó casi a la mitad: 9,10,
27 y 29, utilizando las cuadras 29 entre 9 y 10 y 10 de 29 a 28, para descanso
de los grupos y a la vez, ahorrar electricidad.
En carrozas se vieron: “Fantasía Indígena”, de
Argentinos; “Mi Pequeño Pony”, Alumni; El Globito brindó un homenaje a un autor
brasileño armando todos elementos de percusión -en escala-; Plaza Italia armó
dos mini-carrozas con muñecos mecánicos haciendo piruetas en juegos infantiles,
con las cuales resultó ganadora de 2 segundos premios en esa categoría, dentro
de la cual estuvo, “Valle de las Aves”. Se contrataron varios grupos:
“Blancanieves y los 7 enanitos” -muñecos del Sr. Boné- “Sexitante Show”,
comparsa de Rojas, buena pero no impresionante, volvió “Samba-Samba”, luciendo
un vestuario espectacular, adquirido por completo en Brasil. “El Caballo loco”
-de los alvearenses del Citroen- fue la cuota de alegría. El punto negativo fue
la total falta de comparsas y murgas locales.
En el Corso Infantil se presentaron más de 70
números, entre los que se observó la aparición de 2 numerosas comparsas: una
del CEC y la otra de las P.R.A.P.S. -Escuelas de Verano-. Antaño prometía
mucho, dada la cantidad de inscriptos. Así fue, desfilaron cuadros a montones:
un Zeppelín que se cansó de hacer “maldades”, “Las Chicas de Adidas”, comparsa
formada por los empleados de la misma; “Vacaciones en Hawai” -una bicicleta a
vela-; “Arrasó el Malón” -y arrasó con todos-. La segunda noche, la comisión,
decidió no cobrar entrada, como agradecimiento al público por el apoyo brindado
con su presencia.
En la elección local el trono fue para Marisol
Soledad Montenegro -Sportivo-. En estas fiestas, el nivel se vio equiparado,
pero hacia abajo. El detalle sobresaliente lo puso el público con su presencia.
COMISIÓN DEL CARNAVAL
En el año 1995, por convocatoria de la
Municipalidad de 25 de Mayo para formar la Comisión
Institucional de Fiestas Populares se presentaron a la reunión citada
muchas instituciones con ganas de participar. Ya en la segunda reunión solo
quedaron 6 interesados que fueron los que integraron la Comisión fundadora. El
Club Plaza Italia, Juventud Unida, Argentinos, en ese entonces el Globito,
también estuvo el Centro Educativo Complementario y Capilla del Carmen. El
presidente elegido fue Héctor Alfredo Dentice, al cual le siguió José María
Estévez, Félix Carlos Locatelli y el actual Carlos Alberto Ferreyra.El Carnaval
de 25 empezó a crecer a pasos agigantados, la fiesta era en el centro del
pueblo y todos los veinticinqueños participaban masivamente de sus motivos. Se
hacía el Carnaval Oficial, el carnaval de Antaño y el de Niños.El 15 de
diciembre de 1997 se solicita Personería Jurídica. En este mismo año se van
algunas instituciones y quedan en la comisión el Club Argentinos, el Globito,
Juventud Unida, Centro Educativo Complementario y Capilla del Carmen. El
trabajo era mucho y se necesitaba más gente. En el año 1999 entran como
colaboradores el Club Alumni, Plaza España, Sportivo y El Coral 25. Y el 28 de
abril de ese año se otorga definitivamente la Personería Jurídica.Para el 2000
el Club Sportivo y el Coral 25 pasan a ser integrante de la comisión.
En el año 2001 después de mucho ir y venir se
traslada el Corsódromo al actual Boulevar Valmarosa del Parque Laguna Mulitas
donde hoy se está progresando día a día en su infraestructura. Y en ese año
también, se incorporan al carnaval las comparsas Ángeles y Demonios, actual
Así-Así y por decisión de la comisión, se deja de hacer el carnaval de Antaño.
A fines del 2003 la comisión da un vuelco e ingresan como miembros,
representantes de las dos comparsas que tomaron peso e importancia dentro del
carnaval que son Mirú-Mirá y Angeles y Demonios.
En la Actualidad son 7 instituciones que
participan activamente de las actividades de la Comisión: Club Atlético Argentinos, Club Juventud Unida,
Centro Educativo Complementario Nº 802, Comunidad del Carmen, Amigos de
Mirú-Mirá, Davemar y Así – Así (ex Ángeles y Demonios).
EL CORSÓDROMO
El Corsódromo es un escenario al aire libre,
único en la provincia de Buenos Aires, ubicado en el Boulevar Valmarosa, del
Parque Laguna “Las Mulitas”, un espacio recreativo de 30 has. Este lugar
permite que el espectáculo de carnaval se disfrute desde cualquier rincón ya
que proporciona una perfecta visión hacia la pasarela de 400 metros de largo
por 8 metros de ancho, donde desfilan más de 500 personas, tiene una capacidad
para 6000 espectadores cómodamente sentados (sectores VIP, sillas y mesas,
servicio de gastronomía, sonido digital, seguridad, sanitarios y
estacionamiento son sólo algunas de las comodidades ofrecidas). Brillo, color,
belleza y alegría en el corsódromo de 25 de Mayo demuestran el entusiasmo y el
trabajo incansable de nuestra gente.
¿QUIENES FORMAN PARTE DE
LAS NOCHES DEL CARNAVAL?
3 comparsas (Así-Así, Mirú Mirá y Burucuyá)
2 Batucadas (Emperatríz y Maimará)
4 Carrozas (Club Argentinos, Así Así, Comunidad Del Carmen y Club Atlético Juventud Unida)
¿QUÉ COMPARSA Y QUE CARROZA NO ESTAN PRESENTES EN LA EDICION 2020?
Comparsa
Da.Ve.Mar
Carroza
del Club Juventud Unida
CANTIDAD DE ESPECTADORES
APROXIMADO POR TEMPORADA
Son cincuenta mil espectadores los que visitan el carnaval durante las ocho noches que se desarrolla.
¿CUÁNDO SE EMPIEZA A
TRABAJAR EN LA PRODUCCION DEL CARNAVAL?
Las
instituciones empiezan a trabajar en la producción del próximo año del carnaval
una vez que termina la temporada oficial (ocho sábados arrancando el segundo fin de semana de
enero). Los meses de producción son desde marzo a diciembre.
LOCALIZACION GEOGRÁFICA
DE 25 DE MAYO
25 de Mayo
es un partido dentro de los 135 municipios que conforman la provincia de Buenos
Aires. Esta situado a 220 km de la Capital Federal.
Las rutas
de acceso que te acercan a esta ciudad ubicada en el centro de la provincia
son: Ruta Provincial 46 y Ruta Provincial 51.
¿QUIÉN ES EL INTENDENTE
ACTUAL DEL PARTIDO DE 25 DE MAYO?
El intendente actual es el Dr. Ramiro Egüen.
¿QUIÉN LLEVA ADELANTE LA
ORGANIZACIÓN DE LA FIESTA PROVINCIAL DEL CARNAVAL DONDE SE PRODUCE LA ELECCION
DE LA REINA PROVINCIAL DEL CARNAVAL?
La Fiesta Provincial del Carnaval donde se elije a la Reina Provincial del Carnaval es organizada por la Comisión Institucional de Fiestas Populares integrada por siete instituciones locales (Club Atlético Argentinos, Club Juventud Unida, Centro Educativo Complementario Nº 802, Comunidad del Carmen, Amigos de Mirú-Mirá y Así – Así) y el Gobierno Municipal a través de la Secretaría de Cultura, Deporte y Juventud.